La travesía hacia los modelos eléctricos es un camino que todas las marcas deberán emprender en Europa antes de 2035, si quieren seguir vivas en el mercado. Una de las que ya ha avanzado bastante en la materia es BMW, que tiene entre sus planes reducir la personalización de sus vehículos actuales para centrarse en una producción más eficiente.

El motivo de esta medida es el alto precio para desarrollar la tecnología eléctrica, lo que incluye motores y baterías. Para mantener intactos los márgenes de beneficio, el Grupo BMW ha confirmado que las diferentes opciones para configurar un coche por parte del comprador se verán reducidas.

Galería: El primer BMW i4 de producción sale de fábrica

El director financiero de la firma germana, Nicolas Peter, en una entrevista con Financial Times, así lo reveló. Según el ejecutivo de la firma bávara, determinadas combinaciones de colores y accesorios elegidos por un reducido nicho de clientes, representan un coste importante en la producción.

Por ello, BMW ha optado por eliminar algunas de estas opciones para mantener la eficiencia de sus fábricas. Estas fueron las palabras de Peter sobre el tema que afectará al futuro de la compañía:

"Podríamos reducir a la mitad las posibilidades de personalización de un modelo sin perder ni un solo cliente. Necesitamos ser más eficientes y ahorrar en recursos".

BMW iX en la Universidad Rey Juan Carlos

En la actualidad, las opciones de personalización de BMW son bastante amplias y, por ejemplo, incluyen colores de carrocería, tapizados y accesorios adicionales. Sin embargo, el volumen de esas combinaciones se reducirá significativamente en breve.

El primer BMW i4 de producción sale de fábrica

La marca bávara, sin embargo, no es la única que simplifica su producción. Mercedes-Benz ya ha anunciado que fabricará solo vehículos con transmisión automática a corto plazo, mientras que Volvo únicamente ofrece un pequeño listado de motores térmicos de cuatro cilindros para toda su gama de siete modelos, incluidas las versiones híbridas enchufables (plug-in hybrid), además de las variantes 100% eléctricas.

El primer BMW i4 de producción sale de fábrica

A través de esta operación, el objetivo de BMW es aumentar la cantidad de modelos eléctricos vendidos, y esperan cerrar 2021 con 100.000 unidades 'cero emisiones' en manos de nuevos clientes. La marca de Múnich desea triplicar esta cifra para el siguiente curso, aunque dependerá de si la crisis de los microchips lo permite.

Fuente: Financial Times