El fabricante británico Rolls-Royce acaba de desvelar uno de sus últimos proyectos especiales o Bespoke. Se trata de un Rolls-Royce Phantom único, lo que solemos denominar one-off, creado a medida para un cliente japonés: el emprendedor y coleccionista Yusaku Meazawa, que según la marca, es un gran amante de los automóviles.

Denominado Rolls-Royce Phantom Oribe, este coche ha sido creado en colaboración con la lujosa firma de moda francesa Hermès, y como es lógico, se ha fabricado a mano por parte de los artesanos y especialistas de la compañía de Goodwood.

Galería: Rolls-Royce Phantom Oribe

El modelo luce una carrocería bitono que combina el color Oribe Green con un tono crema, y la decoración está inspirada en la colección Oribe de cerámica antigua japonesa del siglo XVI, del propio Meazawa. Gran parte del vehículo luce el característico tono verde, y solo los bajos, la llamada 'línea de carácter' y el paragolpes trasero, van pintados en color crema.

El comprador ha asegurado que el coche es un complemento para su nuevo jet privado y, de hecho, la propia Rolls-Royce ha facilitado este color verde Oribe, creado específicamente para Meazawa, para que el avión del cliente japonés pueda estar pintado en el mismo tono que su lujosa berlina inglesa. 

Rolls-Royce Phantom Oribe
Rolls-Royce Phantom Oribe
Rolls-Royce Phantom Oribe

En el habitáculo del Phantom también han trabajado los especialistas franceses de la sede de Hermès, en París, y ofrece una decoración similar a la del exterior, en este caso con gran cantidad de cuero verde Enea de Hermès, sobre todo en las zonas que más se tocan, como el volante, algunos tiradores, el selector del cambio o los mandos rotatorios del climatizador, pero también en puertas, consola...

Las zonas verdes se combinan con elementos también en colores crema y marrón, y no faltan, por supuesto, molduras decorativas de madera o las habituales y mullidas alfombrillas de lana de cordero de Rolls-Royce, además de una nevera para champán, entre otras cosas.

Rolls-Royce Phantom Oribe
Rolls-Royce Phantom Oribe
Rolls-Royce Phantom Oribe

También hay un distintivo de Hermès en la tapa de la guantera, además de costuras de la firma en los cojines de los reposacabezas y las banquetas de los asientos, o detalles contrastados en color blanco 'concha de mar'. En cuanto a inserciones propias del departamento Rolls-Royce Bespoke, destacan los elementos de madera de nogal, de poro abierto, en puertas o consola.

Como es lógico, lo que no ha trascendido es el precio de esta creación tan especial, pero teniendo en cuenta que el Phantom arranca en alrededor de 500.000 euros, nos podemos hacer una idea del disparate que ha debido costar este Oribe one-off.