Después de un primer récord rodeado de polémica, la compañía SSC North America no tuvo más remedio que intentar repetir el intento, y lo hizo en el mes de octubre, aunque problemas de refrigeración del SSC Tuatara dieron al traste con el posible récord. Ahora, no obstante, el fabricante ha conseguido su propósito.
En este caso, no ha tenido lugar en la carretera Nevada State Route 160, del estado de Nevada, donde se llevó a cabo el primer récord, sino en la pista de pruebas Johnny Bohmer, dentro de las instalaciones de aterrizaje de transbordadores de la NASA, en Florida.
Además, en lugar de utilizar para el récord al piloto de la primera ocasión, Oliver Webb, en este segundo intento, llevado a cabo el pasado 17 de enero, a los mandos del Tuatara estaba el propietario del vehículo, Larry Caplin, que solo dispuso de una pista de 3,7 kilómetros de longitud.
Como es habitual, para hacerse con el récord hay que hacer una pasada en cada sentido, para después obtener la media de velocidad, que en este caso asciende a 455,3 km/h, promedio de los 450,1 km/h de la primera pasada y los 460,4 km/h de la segunda.

Una velocidad que queda lejos de los 508,73 km/h del primer récord, aunque la explicación es sencilla. En aquella ocasión dispusieron de muchos más kilómetros de carretera, tanto para acelerar como para frenar, y aquí han estado limitados por la longitud de la pista de la NASA.
Cabe recordar que esta bestia esconde un motor V8 biturbo, de 5,9 litros y cigüeñal plano, desarrollado por Nelson Racing Engines y capaz de ofrecer una potencia de 1.775 CV, siempre y cuando se utilice combustible E85, o bien 1.369 CV, con gasolina de 91 octanos.

El propio CEO de SSC North America, Jerod Shelby, explica las diferencias entre ambos récords de la siguiente manera:
"Tomamos un enfoque diferente esta vez a la hora de llevar el coche hasta altas velocidades. Larry Caplin, que es el dueño del coche, utilizó una estrategia tipo 'drag race', con el pedal a fondo durante 40 o 50 segundos. En octubre fuimos ganando velocidad mucho más despacio, y solo utilizamos el pedal a fondo durante 20 o 25 segundos."
Para evitar controversia esta vez, la compañía utilizó cuatro tipos de dispositivos de medición diferentes: el VBox de Racelogic y otros de Life Racing, Garmin y de la IMRA (International Mile Racing Association), con representantes de tres de estas empresas presentes durante el récord.

Así pues, con una velocidad media de 455,3 km/h, el SSC Tuatara es más rápido que el Agera RS (447,2 km/h), superando también la marca de velocidad máxima absoluta del modelo sueco (458 km/h). El Bugatti Chiron Super Sport 300+, eso sí, logró 490,48 km/h, aunque aquel intento de récord no fue válido, ya que solo se realizó en un sentido de la pista de pruebas de Ehra-Lessien.
Fuente: SSC North America