Con la llegada de la nueva generación, el Land Rover Defender ha cambiado radicalmente su estilo, así como su gama mecánica, volviéndose mucho más moderno y refinado, si lo comparamos con el modelo anterior.
Sin embargo, ese nuevo aspecto parece no haber convencido del todo a los chicos de Carlex Design, un preparador polaco, que se ha lanzado a darle un aspecto más 'maligno' al legendario TT británico.
Su nombre es Land Rover Defender Racing Green Edition y, dejando a un lado la pintura verde especial que cubre parte de la carrocería y que da nombre al coche, el elemento que protagoniza esta preparación es la fibra de carbono.
De hecho, el efecto del carbono no te dejará indiferente, tal y como demuestran los pasos de rueda ensanchados, el capó o la cubierta de la rueda de recambio, que contrastan con el clásico color verde que empleaban los coches de carreras británicos, creado para la ocasión por Carlex Design.
Así las cosas, el preparador polaco habla de un "efecto discreto", aunque hay muy poco de discreción en su creación. Y no solo por los rasgos de la carrocería, sino también, por las franjas blancas que cruzan el capó y el techo o las estridentes llantas de aleación.
Algo parecido sucede en el interior, donde los cambios se podrían calificar con cualquier término que se aleje de algo discreto. De hecho, basta con echar un vistazo a los asientos y la tapicería de cuero, negra y marrón, para darse cuenta.
Las actuaciones de Carlex Design sobre el Land Rover Racing Green Edition solo afectan a la parte estética, dejando intacta toda la parte técnica y mecánica. De hecho, la compañía habla de que el coche tiene un precio de 85.000 euros, aunque desconocemos sobre qué variante de la gama se ha trabajado.
Dicho esto, no es la primera vez que Carlex Design se lanza a 'reinterpretar' el diseño del Defender, por su cuenta y riesgo, tal y como puedes descubrir en la galería de fotos que cierra este post.