Bienvenidos, una semana más, a nuestra sección 'Hoy es domingo y hablamos del Renault 5', un espacio donde tratamos de encontrar unidades curiosas y llamativas de nuestro clásico deportivo favorito: el ya legendario Renault 5 Turbo.

Esta vez, vamos a viajar al pasado para conocer un ejemplar de competición. Concretamente, hasta París, un 8 de febrero de 2017. Allí salió a la venta esta espectacular unidad, en el marco de Rétromobile 2017, en un evento organizado por RM Sotheby's.

Hablamos de un Tour de Corse homologado para competir dentro del legendario Grupo B del Mundial de Rallies, con una historia que merece ser contada. Uno de los apenas 20 que se fabricaron, fácilmente distinguible por los antinieblas circulares y los intermitentes colocados en posición vertical.

Galería: Renault 5 Turbo Tour de Corse de 1983

¿Por qué decimos que su historia es curiosa? Básicamente, por la ajetreada vida del Turbo con el número de chasis D000020. Según parece, su andadura comienza en el año 1981, cuando participa en el Montecarlo, en manos de Bruno Saby y con Daniel Le Saux en el asiento de la derecha.

Ragnotti venció la prueba para la marca gala, pero el coche número 20 de Saby abandonó tras un accidente. Después del incidente, el coche fue vendido a Alexandros Maniatopoulos, piloto e importador de Renault para Grecia.

Todavía con el coche en su configuración de Grupo 4, y una preciosa decoración de Fina, consiguió alzarse con el octavo puesto en el Rally Acrópolis, de 1982. Pero 'Leonidas', como era conocido, necesitaba más. Así las cosas, el R5 viajó a la sede de Renault Sport, en Dieppe (Francia), donde se produjo la transformación definitiva del coche.

Sin duda, la mayor de las mejoras, en su actual homologación como Grupo B, la experimentó el motor de 1.397 cm3, que pasó de 255 a nada menos que 300 CV de potencia. Poca broma... aunque todavía lejos de los 350 CV que alcanzó el Maxi Turbo de 1985.

Tras volver a participar en el Acrópolis de 1983 y en algunas pruebas nacionales, 'Leónidas' le vendió el coche a otro griego, Dimitris Manolopoulos, quien compitió con su hijo desde la campaña 1984, en todo tipo de pruebas, con unas 200 victorias, entre rallies nacionales y carreras en cuesta.

Lo último que sabemos del coche, es que se vendió en 2017, alcanzando los 257.000 euros. Una cifra verdaderamente impresionante, pero que se queda ligeramente por detrás de las dos unidades de las que ya te hemos hablado anteriormente (tienes los enlaces más arriba). Eso sí, ambos pertenecieron a Jean Ragnotti... y ese es un pedigrí de primera.

Galería: Subasta Renault 5 Turbo Ragnotti