Si bien ya hemos visto el futuro Aston Martin Valkyrie durante sus pruebas en circuito cerrado, por ejemplo en el trazado inglés de Silverstone, junto a los pilotos de Fórmula 1 del equipo Red Bull, el fabricante de Gaydon acaba de anunciar que su espectacular modelo ya está de pruebas en carretera abierta. ¿Dónde? Pues precisamente en las inmediaciones de Silverstone, en el condado de Northamptonshire.
A cargo de las pruebas está, lógicamente, el piloto de pruebas oficial de la marca, Chris Goodwin, que hasta hace unos años tenía el mismo cargo en otra compañía del Reino Unido, McLaren Automotive. Según Aston Martin, los ingenieros y pilotos de la marca se embarcarán ahora en una serie de pruebas 'en el mundo real'. Y ya podemos verlo al natural y en la calle.
Galería: Aston Martin Valkyrie, pruebas en carretera abierta
Las entregas del hipercoche de Gaydon, que están previstas para la segunda mitad de este año 2020, es probable que acaben retrasándose debido al coronavirus. De momento, no sabemos si Aston Martin ha iniciado ya la producción de las unidades para clientes, o si bien están todavía pendientes de ponerla en marcha.
En principio, su producción estará limitada a 150 ejemplares, además de 25 unidades de la exclusiva versión AMR Pro, solo para circuito. El precio de cada unidad rondará los 2,5 millones de libras esterlinas, lo que equivale a unos 2,7 millones de euros al cambio actual, pero esto no ha evitado que todas y cada una de ellas estén ya vendidas, según la marca.

De hecho, el mandamás de la casa, Andy Palmer, cree que el interés que ha generado el Valkyrie les podría haber permitido vender unas 900 unidades, en lugar de solo 150. Entendemos que, si no quieren fabricar más, es precisamente para preservar la exclusividad del modelo y contentar así a los afortunados clientes que ya tengan uno reservado.
El Valkyrie, diseñado por Adrian Newey (todo un genio de la Fórmula 1), es un hiperdeportivo de altos vuelos que recurre a un sistema de propulsión híbrido. Aunque en un principio se anunció que el coche participaría en la futura categoría de hiperdeportivos del Mundial de Resistencia (WEC), finalmente parece que Gaydon ha dado marcha atrás al proyecto.

El alma del coche es un motor V12 atmosférico, de 6,5 litros, desarrollado por Cosworth y capaz de ofrecer 1.000 CV de potencia a 10.500 rpm, además de poder subir hasta las 11.100 vueltas. Ahora bien, hay un punto negativo, y es que el bloque necesita ser revisado y reconstruido por completo cada 100.000 kilómetros.
Como puede que ese millar de caballos del V12 no resultara suficiente, cuenta con el apoyo de una parte eléctrica desarrollada por Rimac (176 CV y 280 Nm adicionales), para alcanzar un total de 1.176 CV de potencia y 900 Nm de par motor máximo, nada menos.