El Citroën 2 CV es un automóvil que, tradicionalmente, ha encarnado el espíritu de la libertad. Espartano, original, económico, confortable... No cabe duda de que este pequeño Citroën clásico no tiene rival cuando se trata de ofrecer la máxima comodidad, mientras se circula por terrenos inhóspitos.
Tal vez eso fuera lo que incitó a Émile Leray, apodado como 'el doctor de la mecánica africano', para realizar una expedición recorriendo el norte de África. Y hoy, recordamos en vídeo un episodio que ha marcado su vida.


En 1993, Leray se adentró en el desierto de Marruecos al volante de su Citroën 2 CV. Como es lógico, en la maleta había incluido todo lo estrictamente necesario para un viaje de este tipo: una caja de herramientas, recambios de todo tipo, gasolina, comida....
Tras unos kilómetros de ruta, Émile se topó con la Gendarmería Real que, por razones de seguridad, le impidió proseguir con su viaje. De modo que, tras dar media vuelta, decidió proseguir por una ruta alternativa, alejado de la mirada de la policía. Pero no todo fue según lo previsto.
Uno de los brazos de la suspensión de su Citroën 2 CV cedió, impidiéndole continuar con su aventura. Ante tal situación, Émile reflexionó sobre las opciones de las que disponía y, finalmente, se decantó por la que, tal vez, fuera la más alocada y original: transformar su Citroën 2 CV en una motocicleta.
Tras 12 días de trabajo, Émile lo consigue y puede proseguir con su viaje. No obstante, una vez más, la policía se cruzará en su camino, multándole con 450 euros (aproximadamente) porque las especificaciones de su vehículo no se ajustaban a las que aparecían en su ficha técnica. Pero creemos que su 'hazaña mecánica' debía ser recordada.
Fuente: Motor1.com