Si en la prueba del Audi S8 decíamos que muchos incautos no valoraban lo suficiente el coche por el hecho de ser una berlina, el Audi SQ8 quattro 2022 de este test sí es del gusto de la mayoría de los clientes actuales. Un 'morlaco' de más de 2,2 toneladas de peso que, lamentablemente, vas a 'infrautilizar' en España.
Sí, porque es un SUV dirigido a las Autobahn alemanas, donde puedes dar rienda suelta a su enorme poderío. Porque dime tú si no tiene un punto de ridículo viajar a 120 km/h en un todocamino V8 biturbo de 507 CV... Efectivamente, la sensación es de ir muy, muy lentos.
Galería: Prueba Audi SQ8 quattro 2022
En cualquier caso, es un coche para disfrutarlo mientras sumas kilómetros sin el menor atisbo de cansancio entre los ocupantes. Porque, como buen 'S' de Audi, es un coche que no ofrece una suspensión de dureza extrema ni un tacto expresamente enfocado a las curvas, aunque luego descubriremos algunos de sus secretos dinámicos.
Elegante deportividad
Tal y como te contábamos en el S8, la estética del SQ8 se identifica al primer vistazo, sobre todo a los que nos gustan los coches, pero no adopta un diseño histriónico.
Me encanta el frontal protagonizada por el negro brillante, así como las carcasas cromadas de los retrovisores (una seña de identidad de los Audi S), las cuatro salidas de escape o la tira LED posterior.



Si nos tenemos que quedar con dos componentes de máxima exclusividad, serían las enormes llantas de aleación de 23 pulgadas (3.210 euros), con neumáticos 285/35, y los frenos carbocerámicos con pinzas en color antracita (11.870 euros). Sumando solo el desembolso de estas dos opciones, ya nos podríamos comprar un coche nuevo.
Interior con 'chucherías'
Ya conocido de otros Q8, el lujoso interior presenta tres grandes pantallas, incluida una para la climatización, y los asientos traseros disponen de regulación longitudinal. No obstante, la 'pimienta' la ponen el volante achatado con la inscripción 'S', las inserciones de carbono o un excepcional equipo de sonido firmado por Bang & Olufsen (desde 1.605 euros).



También son especiales los asientos deportivos y calefactados, que pueden usarse diariamente. Para disponer de ventilación en ellos hay que pagar 1.535 euros y ojo con las personas altas, pues los reposacabezas fijos quedan algo bajos. Y si viajas atrás, puedes disfrutar de un climatizador de cuatro zonas.
Por su parte, el maletero asciende a 605 litros. Gracias a la suspensión neumática en ambos ejes, la altura del plano de carga se puede bajar para cargar más fácilmente el coche. Si abatimos los asientos traseros no se produce un escalón en la superficie.


'Motorazo' V8
El SQ8 2022 tiene derecho propio a montar el propulsor 4.0 V8 de la casa, aunque algo 'descafeinado' frente a la variante del RS Q8, con 600 CV. En este caso, son 507 CV a 6.250 rpm, acompañados por 770 Nm en un amplio rango de revoluciones y con la zona roja situada a 6.750 vueltas. Como no cuenta con el apoyo de un sistema de hibridación ligera, porta la etiqueta C.
Los 4,1 segundos que tarda en acelerar este coche, a pesar de su peso, hablan muy bien del poderío mecánico. También, de la rapidez de funcionamiento de la transmisión automática con convertidor de par tiptronic, con ocho velocidades, que ofrece modo Sport y levas. Personalmente, me gusta llevarla en el programa deportivo para que la mecánica reaccione al instante con la más mínima insinuación sobre el acelerador.


Dinamismo de un Audi S
Aunque es algo secundario en un vehículo así, el consumo medio oficial se sitúa en 12,3 litros cada 100 kilómetros y nosotros hemos marcado 11,5 a lo largo de diferentes viajes de varias horas. El amplio depósito de 85 litros impide que se evapora la autonomía se practicamos una conducción deportiva.
Al arrancar el SQ8, tronan bastante las salidas de escape, pero poco después ese ruido se mitiga, hasta el punto de que incluso con la configuración Destacado del sonido mecánico del Audi drive select, la melodía V8 no se introduce de forma notable, salvo al buscar la zona roja del cuentavueltas.

Hablábamos antes de secretos dinámicos, que pasamos ahora a descubrir. Por ejemplo, la dirección con desmultiplicación variable y baja asistencia, el tren trasero directriz, la suspensión neumática adaptativa deportiva y el diferencial central autoblocante. Todo, de serie. Por 6.775 euros, el tren de rodaje Advanced añade diferencial deportivo (autoblocante) y barras estabilizadoras activas.
Con todos estos mimbres, el Audi SQ8 2022 aborda las curvas rápidas con total entereza y a velocidades inconfesables, mientras que es capaz de superar las concatenadas con mucha más agilidad de la esperada en un vehículo elevado y con este peso. Y qué decir de la frenada con unos discos cerámicos... Al final, el apellido 'S' sale a relucir y no solo por las altas prestaciones.


Pero recuerda que disponemos del programa Individual, en el que podemos dulcificar la configuración del coche y viajar de forma confortable y sin que apenas se introduzca ruido aerodinámico en el interior, a pesar de contar con ventanas sin marco. En fin, una gozada.
Audi SQ8 Plus, aún más premium
Curiosamente, la gama SQ8 dispone de un acabado especial, denominado Plus, como si el coche ya de por sí no fuera suficientemente exclusivo. Este pack incluye faros Audi Matrix LED, techo panorámico, paquete de asistentes City y Tour, pack de aparcamiento plus, volante calefactable, asientos deportivos S con memoria para el conductor, cuero Valcona, banqueta trasera plus y paquete de luces ambiente.
Al elegirlo, en lugar de los 125.130 euros que cuesta el SQ8 estándar, la tarifa sube a 133.330 euros. Una vez llegados a estas cifras, creemos buena idea añadir esos 8.000 euros de presupuesto y tener un SUV de altas prestaciones a tope de equipamiento. Eso sí, tendrás que estar muy pendiente de los radares, ya te aviso...
Audi SQ8 quattro tiptronic 2022