Con el aumento de calidad (y también de precios, por qué negarlo) de Skoda en los últimos tiempos, probar una versión tope de gama de uno de sus modelos supone quedar muy satisfecho en líneas generales. 

El Kamiq Monte Carlo 1.5 TSI 150 CV DSG representa lo mejor de lo mejor en su SUV urbano y eso supone disfrutar de un vehículo que atrapa la vista, que no pierde ni un ápice en el apartado práctico y que resulta sumamente agradable de conducir... a pesar de no ser un RS 'pata negra'. 

Galería: Prueba Skoda Kamiq Monte Carlo TSI 150 CV DSG

Si te parece, vamos a analizar más en detalle esos tres puntos fuertes que acabo de citar. El acabado Monte Carlo aporta un claro toque deportivo al conjunto gracias a muchos componentes específicos. Por ejemplo, las llantas bicolor de 18 pulgadas y las múltiples inserciones en color negro (parrilla, retrovisores, taloneras, barras de techo, splitter, marco de las ventanas...), que vienen de serie.

No todo resulta perfecto, porque esa pintura oscura en los paragolpes sufre más con los habituales toques en los aparcamientos y, cada vez más habitual en el Grupo Volkswagen, se renuncia a integrar salidas de escape a la vista, que quedan siempre fenomenal.

Prueba Skoda Kamiq Monte Carlo TSI 150 CV DSG
Prueba Skoda Kamiq Monte Carlo TSI 150 CV DSG
Prueba Skoda Kamiq Monte Carlo TSI 150 CV DSG

Por supuesto, los cristales vienen tintados, algo ideal para los días soleados, y el gran techo panorámico forma parte del equipamiento de fábrica. El spoiler trasero, el logotipo Monte Carlo y los nombres 'Skoda' y 'Kamiq' en negro rematan esos numerosos toques pasionales. Si te gusta el Blanco Luna Metalizado de nuestra unidad de pruebas, cuesta 635 euros. 

Prueba Skoda Kamiq Monte Carlo TSI 150 CV DSG

Dentro, la personalización viene dada por unos magníficos asientos tipo baquet, que recogen bien el cuerpo, pero dejan suficiente libertad de movimiento para no ser demasiado extremos en el día a día. El del conductor puede llevar reglajes eléctricos por 545 euros. 

No se nos debe olvidar el volante deportivo achatado por la parte inferior, con la inscripción Monte Carlo y con levas integradas, ni tampoco los detalles en color rojo en los propios asientos, el salpicadero, las salidas de aire y las molduras de las puertas. Asimismo, los pilares y el techo en negro aumentan la atmósfera deportiva.

Prueba Skoda Kamiq Monte Carlo TSI 150 CV DSG
Prueba Skoda Kamiq Monte Carlo TSI 150 CV DSG
Prueba Skoda Kamiq Monte Carlo TSI 150 CV DSG

La instrumentación digital es configurable, los pedales están acabados en símil aluminio y, curiosamente, el freno de estacionamiento es por palanca. Hablando de palancas, la de la transmisión DSG es convencional, no la minimalista que emplea Skoda en modelos como el Octavia. Por último, hay diales giratorios 'de los de toda la vida' para manejar la climatización bizona.

Prueba Skoda Kamiq Monte Carlo TSI 150 CV DSG
Prueba Skoda Kamiq Monte Carlo TSI 150 CV DSG

¿Vamos a la parte práctica? El Kamiq Monte Carlo, como buen Skoda, lo borda en este apartado. El espacio interior para cuatro adultos de talla alta (no media) es asombroso y los pasajeros traseros viajan en asientos con los contornos bien marcados. Eso sí, la quinta plaza tiene el inconveniente del voluminoso túnel de transmisión, principalmente. 

También el maletero resulta elogiable, a pesar de no ser el más amplio del segmento. En concreto, hay 400 litros para el equipaje y la bandeja se puede colocar a dos alturas. En la más alta, se genera una superficie plana al abatir los asientos. Lástima que la segunda fila no tenga regulación longitudinal para poder adaptar el coche aún más a nuestras necesidades.

Prueba Skoda Kamiq Monte Carlo TSI 150 CV DSG
Prueba Skoda Kamiq Monte Carlo TSI 150 CV DSG

Y no faltan las tradicionales soluciones Simply Clever, como una rasqueta de hielo en el deposito de combustible, el paraguas integrado en puerta del conductor y la pestaña para sujetar papeles (o tickets de parquímetro) en el parabrisas. Si quieres añadir más, hay un pack por 195 euros con cajones debajo de los asientos delanteros, enchufe de 12V en el maletero y molduras de protección lateral al abrir las puertas.

Hablábamos antes del agrado de conducción, que viene dado tanto por el conjunto motor/transmisión como por el tacto dinámico. En esta web, hemos hablado en muchas ocasiones del motor turbo de gasolina 1.5 TSI de 150 CV, así que tan solo debemos recordar que es un propulsor que mezcla una suavidad total de marcha con un rendimiento destacado en un amplio rango de vueltas.

Prueba Skoda Kamiq Monte Carlo TSI 150 CV DSG

Las prestaciones dan de sobra para ir con varios ocupantes (212 km/h de punta y 8,4 segundos en el 0 a 100) y el consumo no es en absoluto elevado, pues hemos marcado 6,8 litros de media en un uso mixto normal. Como no tiene un aporte eléctrico, lleva la etiqueta C.

En nuestro caso, hemos asociado la mecánica con la también archiconocida transmisión automática de doble embrague DSG, con siete marchas, que incluye gestión deportiva (programa S) y levas para un uso manual y secuencial. Como siempre decimos, esta caja lo hace muy bien en todos los escenarios, desde la ciudad hasta exigiéndole rapidez en conducción deportiva. 

Prueba Skoda Kamiq Monte Carlo TSI 150 CV DSG

¿El acabado Monte Carlo implica cambios en la suspensión? He de decirte que no, salvo que incluyas la suspensión adaptativa, pero eso no supone una mala noticia, porque tenemos un SUV bastante cómodo, pero con suficiente agilidad para darnos un 'homenaje' en nuestras carreteras ratoneras preferidas.

Gracias a que tan solo mide 1,53 metros de altura y pesa 1.200 kilos, el todocamino checo se mueve con soltura en todo tipo de curvas. Además, los neumáticos con dimensiones 215/45 proporcionan un buen agarre lateral y los discos ventilados delante y macizos detrás son más que suficientes para bajar la velocidad en distancias cortas.  

Prueba Skoda Kamiq Monte Carlo TSI 150 CV DSG

Recuerda que el Kamiq se sustenta sobre la plataforma MQB A0, por lo que no es posible adquirirlo con tracción total. A cambio, contamos con varios programas de conducción: Eco, Normal, Sport e Individual. Con varios de ellos se activa la navegación a vela, con el fin de ahorrar combustible. 

El puesto de conducción está ligeramente elevado. De hecho, se puede observar claramente el final del capó, cuya franja central está sobreelevada, un toque deportivo interesante siempre a la vista. Como colofón a este agrado, debemos citar el interior bien aislado de ruidos exteriores a velocidades de crucero. 

A pesar de que el equipamiento de serie del acabado Monte Carlo es bastante bueno, Skoda propone varios packs opcionales que deberías tener en cuenta. Algunos son de carácter premium, mientras que otros van enfocados a la conectividad, como el Confort (350 euros), que integra cuatro puertos USB, carga inalámbrica y sistema multimedia smartLink con conexión sin cables. 

Decíamos al inicio que los Skoda ya no son tan asequibles como antes, pero está fuera de dudas que la inversión es buena. Por esta variante, la marca checa pide 31.935 euros sin incluir los extras. Hablamos de un SUV urbano, aunque podría actuar como primer coche familiar dada su amplitud y si encima es distinguido y rinde mecánicamente muy bien, ¿qué más se puede pedir?

Skoda Kamiq Monte Carlo TSI 150 CV DSG

Motor Gasolina, 4 cilindros en línea, turboalimentado, 1.498 cm³
Potencia 150 CV entre 5.000 y 6.000 rpm
Par máximo 250 Nm entre 1.500 y 3.500 rpm
Caja de cambios Automática de doble embrague DSG, 7 velocidades
0-100 km/h 8,4 s
Velocidad máxima 212 km/h
Consumo 6,2 l/100 km
Tracción Delantera
Longitud 4,24 m
Anchura 1,79 m
Altura 1,53 m
Peso en vacío 1.202 kg
Número de asientos 5
Capacidad del maletero 400 l
Precio base 31.935 euros