El Subaru Impreza es uno de los modelos más conocidos en nuestro país de la firma japonesa. De hecho, de las cinco generaciones que componen su currículum, cuatro se han vendido en nuestro país, siendo uno de los modelos mejor valorados por el público a lo largo de los años.
Ahora, el Impreza estrena la tecnología híbrida e-BOXER, una solución que le faltaba por ofrecer, heredada de otros modelos de la casa como el Forester EcoHYBRID o el XV EcoHYBRID.
A diferencia de los todocaminos anteriormente mencionados, el Impreza es un modelo compacto con claras aspiraciones a vivir en armonía con la ciudad y sus alrededores. Y ahora más que nunca, gracias a esta nueva tecnología que, por ejemplo, le da derecho a disfrutar de las ventajas de la etiqueta Eco de la DGT.
Hasta ahora, los clientes del Impreza solo habían podido elegir versiones equipadas con mecánicas de gasolina o la bifuel de gasolina y GLP (gas licuado del petróleo).
Sin embargo, ahora el nuevo motor de 2,0 litros de cilindrada, junto con otro eléctrico de 17 CV, permiten ofrecer una potencia total de 150 CV y un par motor máximo de 194 Nm. Y ese cambio se nota nada más ponernos en marcha. Pero de eso hablaremos más tarde.
Junto al motor, encontramos la conocida transmisión automática Lineartronic, con variador continuo, que asegura un suave funcionamiento en la mayor parte de las ocasiones. La tracción, como no podía ser menos, es integral permanente y simétrica (Symmetrical All-Wheel Drive), y el motor mantiene el esquema de cilindros opuestos (bóxer), típico del fabricante japonés.

Respecto a las dimensiones, nada cambia con la generación presentada en 2018. Es decir, hablamos de un modelo compacto, de 4,47 metros de longitud, por 1,77 de anchura y 1,51 de altura, con una distancia entre ejes de 2.670 milímetros, lo que asegura un habitáculo relativamente amplio.
El espacio de carga, por su parte, llega a 340 litros. Es la misma capacidad que las versiones que emplean GLP, aunque menos que los 385 litros que ofrece el Impreza con motor térmico.

De igual forma, el Impreza asegura un elevado nivel de seguridad al equipar, de serie, el denominado sistema de seguridad Eyesight, ya presente en otros modelos de la gama Subaru.
Mediante un sistema de cámaras y sensores ubicados en el parabrisas, el sistema controla de forma autónoma diferentes dispositivos de ayuda a la conducción, como el de frenada de emergencia con detección de peatones, el control de velocidad de crucero adaptativo, el sistema de alerta de salida y de mantenimiento en el carril o el asistente de atasco, por citar los más destacados.

Como apuntábamos al comienzo, la adopción del nuevo motor de cuatro cilindros y 2,0 litros de cilindrada repercute, directamente, en una mayor agilidad. El coche acelera de forma más contundente, gana velocidad con mayor facilidad y afronta maniobras como las de adelantamiento, con mucha más solvencia. En definitiva, el Impreza mantiene un elevado compromiso ecológico, al tiempo que ofrece mejores argumentos como único vehículo familiar.
En el resto de apartados dinámicos, el Impreza sigue mostrando una faceta equilibrada. La suspensión no peca ni de seca, ni de excesivamente blanda, aunque sí que es cierto que la balanza se decanta más por el confort que por otra cosa. La dirección trabaja de forma 'silenciosa', pero notablemente precisa, guiando al tren delantero ante la más mínima insinuación del conductor.

Respecto a las prestaciones de esta versión, la velocidad máxima oficial llega a 192 km/h, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 10 segundos. Unos valores que superan con claridad los 180 km/ y los 11,8 segundos del Impreza 1.6i.
En cuanto al consumo mixto, como es lógico ante el aumento de potencia, el gasto de carburante se eleva ligeramente. La nueva versión EcoHYBRID se conforma con 7,7 litros cada 100 kilómetros. Un valor razonable para la potencia disponible.

Antes de acabar, déjame puntualizar que la gama del Impreza se ha reducido para facilitar la elección del comprador. El único acabado disponible para el Impreza EcoHYBRID recibe el nombre de Urban y cuenta con una generosa dotación de fábrica.

Su precio de partida es de 33.250 euros sin descontar las promociones del fabricante, cifradas en 2.000 euros en el momento del lanzamiento, así que la cantidad a desembolsar es de 31.250 euros, salvo que puedas acogerte a ayudas añadidas por parte de la administración.
En definitiva, el Impreza se actualiza para seguir siendo un compacto actual, seguro y con tecnología de vanguardia.
Subaru Impreza EcoHYBRID Urban 2021