Sabemos que muchos de vosotros sentís predilección por los vehículos camperizados y, por eso, ahora que estamos en invierno y hay tiempo para reflexionar sobre una compra de este tipo, os traemos esta interesante prueba del Peugeot Rifter by Tinkervan 2020.
¿Por qué conviene prestarle atención? Porque este modelo es uno de los más asequibles para aquellos que necesitan abandonar la civilización periódicamente y vivir un fin de semana o unos días de asueto de auténtica aventura.
Galería: Prueba Peugeot Rifter by Tinkervan 2020
La preparación, que se asocia obligatoriamente a la carrocería alargada Long, de 4,75 metros de longitud, incluye lo imprescindible para no tener que depender de nada ni de nadie en una excursión de varios días.
Incluso te puedes escapar en jornadas frescas, porque el coche dispone de una calefacción auxiliar Webasto. Por si fuera poco, la batería extra, que se recarga con el funcionamiento del vehículo, sirve para alimentar diversos componentes tecnológicos.
Obviamente, para pasar una noche en el coche, necesitas un colchón y el Peugeot Rifter by Tinkervan 2020 lo ofrece... y además de viscoelástica. No resulta especialmente complicado acoplar la base y el propio colchón, aunque también es verdad que la longitud disponible limita el descanso a adultos poco espigados.
Cuando se esconde el sol, los ocupantes disponen de dos flexos con tecnología de tipo LED, con doble intensidad. Así, no tendrás que estar preocupado de llevar frontales ni linternas en tu maleta.
Tampoco falta una práctica mesa, diseñada para poderse acoplar de diferentes modos en el habitáculo del vehículo, tanto de forma longitudinal como transversal. Por supuesto, también puede situarse fuera del automóvil, acompañada por un toldo, que forma parte del equipamiento opcional.
Por cierto, el asiento del copiloto se puede abatir por completo y, añadiendo un módulo supletorio, puedes crear una plaza extra con suficiente comodidad, como puedes comprobar en la siguiente foto.


¿Y si llegas al Peugeot Rifter by Tinkervan 2020 después de una larga caminata? Pues nada mejor que refrescarte con una ducha de 10 litros, eléctrica, a través de una bomba de 12 V. En fin, como ya habrás podido comprobar, en esta furgoneta tan especial todo está pensado al detalle para disfrutar del campo con comodidad.
Por cierto, para aquellos que dispongan de un presupuesto más elevado, la lista de accesorios opcionales incluye una pequeña nevera y cortinas para los laterales y la zaga del vehículo.


Lógicamente, debido a la instalación de varios componentes, el amplio maletero de 850 litros de un Rifter Long convencional queda reducido. No significa una crítica, sino algo irremediable en una preparación de este tipo.
Por lo demás, el Peugeot Rifter by Tinkervan 2020 sigue mostrando buenas maneras dinámicas. Es un coche estable, fácil de conducir y con reacciones previsibles en curvas. Todo, complementado por un confort de marcha muy destacado. Se nota que su base, la plataforma EMP2, es la misma que la de turismos y SUV, como el 508 y el 3008.


El conductor disfruta de una postura al volante muy confortable, con las piernas bien flexionadas, y se beneficia de un salpicadero perfectamente organizado y muy ergonómico, comandado por la famosa instrumentación Peugeot i-Cockpit. Ya sabes que consta de un volante de pequeño tamaño, achatado por la parte superior y la inferior, al que te acostumbras con rapidez, más una instrumentación en posición elevada.
Las plazas traseras son individuales, como sucede (más bien sucedía) en los monovolúmenes, y ofrecen mucho espacio en todas las cotas. Además, las puertas laterales correderas son una solución perfecta para acceder y salir del habitáculo, sobre todo si el coche está aparcado en batería. Huelga decir que abundan los huecos portaobjetos, una cualidad propia de este tipo de vehículos.

En cuanto al motor, escogemos el turbodiésel BlueHDi 100, de 1,5 litros y 100 CV, que se combina con una caja manual de cinco velocidades. Este propulsor convence, sobre todo, por lo bien aislado que está y por su satisfactorio rendimiento en regímenes intermedios. Es más, conviene llevarlo por encima de las 1.800 vueltas, pues si no prácticamente estaremos obligados a reducir de marcha.
Los consumos rondaron los 6,0 litros cada 100 kilómetros, una cifra que, a buen seguro, agrada a cualquiera. No obstante, si quieres o necesitas más prestaciones, otras opciones mecánicas son el BlueHDi 130 y, si no vas a hacer muchos kilómetros anuales, la de gasolina PureTech 130, un bloque turboalimentado de tres cilindros, con 1,2 litros y 130 CV.

¿Precios de la preparación Tinkervan? Si escoges el Rifter Long con motor de gasóleo, como en nuestro caso, asciende a 4.750 euros más impuestos. La variante BlueHDi 100 con el acabado Allure cuesta 22.270 euros, por lo que puedes tener una furgoneta camperizada en el entorno de los 28.000 euros. No está nada mal, ¿verdad?
Ahora ya solo queda que hagas números y empieces a plantearte la utilidad de un coche de manera más campestre. Desde luego, es un buen remedio para combatir el estrés del día a día...


Equipamiento de la camperización: mesa de uso interior y exterior, asiento supletorio, batería auxiliar, calefacción auxiliar de gasoil, cama extraíble, colchón de viscoelástica, tapicería desenfundable, ducha de 10 litros, dos tomas de 12 V y tres tomas dobles de USB.
Peugeot Rifter Long by Tinkervan BlueHDi 10