Los modelos compactos parecen decididos a plantar cara al huracán protagonizado por los todocaminos, dominadores de las ventas de nuestro mercado. Al menos, gracias a la practicidad que aportan las carrocerías familiares con sus enormes maleteros. Aunque no lo sepas, en muchos casos ofrecen un volumen de carga superior al de un SUV (Sport Utility Vehicle) equivalente.  Un buen ejemplo es el Renault Mégane Sport Tourer que anuncia una capacidad de 521 litros, frente a los 472 del Kadjar.

Renault Megane Sport Tourer 2017 prueba

Imagen cuidada


Así las cosas, el modelo francés luce un aspecto moderno, con una estética muy parecida al Mégane de cinco puertas. En el frontal, llaman la atención las ópticas principales, con las luces de conducción diurna dibujando un curioso formato. Sin embargo, la principal diferencia la encontramos en la zaga, donde los pilotos, con diodos luminosos que recorren el portón del maletero, marcan las diferencias más obvias entre ambas carrocerías.

Renault Megane Sport Tourer 2017 prueba
Renault Megane Sport Tourer 2017 prueba
Renault Megane Sport Tourer 2017 prueba

Respecto a las dimensiones, el familiar galo anuncia una longitud de 4,63 metros, por 1,81 de ancho y 1,46 de alto. La distancia entre ejes es de 2,71 metros algo que se traduce en un habitáculo amplio y confortable. El interior alberga cinco plazas y si reclinamos los respaldos posteriores, la capacidad de carga puede crecer hasta los 1.504 litros.

Mecánica superventas

Si pasamos al capítulo mecánico, nuestro protagonista equipa el propulsor turbodiésel Energy dCi 110. Tiene arquitectura de cuatro cilindros, 1.461 cm3 y desarrolla una potencia de 110 CV a 4.000 rpm y un par motor de 260 Nm disponibles desde las 1.750 vueltas. En nuestro caso, la caja de cambios es manual de 6 velocidadades, aunque en opción se puede equipar una automatizada de doble embrague EDC, con el mismo número de marchas.

Del motor, debemos destacar lo reducido de sus consumos. El gasto en carburante en ciclo mixto es de solo 3,7 litros cada 100 kilómetros que, en condiciones habituales de uso sube hasta los 4,5 litros.

Renault Megane Sport Tourer 2017 prueba

Asimismo, por dinámica de conducción, el Mégane Sport Tourer obtiene una buena nota. El tren delantero obedece a las órdenes marcadas por el conductor con precisión. El exceso de sobreasistencia presente en otras generaciones, casi ha desaparecido y eso se traduce en una evidente sensación de confianza y confort. Además, el escalonamiento del cambio permite aprovechar al máximo el rendimiento de la mecánica.

Bien es verdad que, en frío, el propulsor suena más de lo recomendable. Sin embargo, una vez alcanzada la temperatura de servicio, las vibraciones y la sonoridad transmitida al habitáculo son casi imperceptibles. Evidentemente, no es un vehículo pensado para conseguir unas prestaciones notables, aunque para circular a ritmos legales a plena carga, resulta más que suficiente.

 

 

Personalidad múltiple

Por otra parte, el control dinámico de la conducción Renault MULTI-SENSE permite adaptar la respuesta del vehículo a las necesidades del conductor en cada momento. Si necesitas consumir lo menos posible, deberías seleccionar el modo Eco, mientras que si quieres ser el primero en llegar al colegio para recoger a tus hijos, deberías optar por el modo Sport. En este último caso, apreciarás una agilidad extra muy útil al afrontar adelantamientos en carreteras de doble sentido o al afrontar tramos revirados de montaña.

Renault Megane Sport Tourer 2017 prueba
Renault Megane Sport Tourer 2017 prueba
Renault Megane Sport Tourer 2017 prueba

En el plano tecnológico, la pantalla del sistema de infoentretenimiento R-Link 2, con un tamaño de 8,7 pulgadas, conseguirá que fijemos nuestra atención en el salpicadero. Es opcional, pero a la vista de la claridad con la que muestra las órdenes del sistema de navegación y la facilidad con la que se maneja, resulta un elemento opcional muy recomendable.

Sin duda, un complemento perfecto para coronar un generoso equipamiento de serie, en el que encontramos, por ejemplo, sensores de aparcamiento traseros, sistema de reconocimiento de señales de tráfico, climatizador automático bizona y llantas de aleación de 17 pulgadas.

Renault Megane Sport Tourer 2017 prueba
Renault Megane Sport Tourer 2017 prueba

Todo, por un precio de partida de 26.150 euros, al margen de las promociones de fabricante. Sin duda, hablamos de un familiar con una estética llamativa, una óptima dotación de fábrica y una mecánica turbodiésel equilibrada. Una compra muy sensata de un vehículo que, además, se fabrica en España.

Equipamiento de serie: Airbags frontales, laterales y de cabeza para conductor y acompañante, sistema antibloqueo de frenos ABS, asistente al arranque en pendientes, control de estabilidad ESP, sistema de monitorización de presión de los neumáticos, climatizador automático bizona, asientos delanteros deportivos, sensores de lluvia e iluminación, volante multifunción acabado en cuero, control dinámico de la conducción Renault MULTI-SENSE, Bluetooth, puerto USB, pantalla táctil de 7,0 pulgadas  y llantas de aleación de 17 pulgadas.

Opciones: Pintura metalizada (480 euros), sistema de infoentretenimiento R-LINK 2 (300 euros), cámara trasera de asistencia al aparcamiento (600 euros), faros Full LED (579 euros), Head-up Display (289 euros), techo solar panorámico (900 euros) y llantas de aleación de 18 pulgadas (450 euros).

Renault Mégane Sport Tourer

Motor Diésel, 4 cilindros en línea, turboalimentado, 1.461 cm3
Potencia 110 CV a 4.000 rpm / 260 Nm a 1.750 rpm
Caja de cambios Manual, 6 velocidades
0-100 km/h 11,6 s
Velocidad máxima 187 km/h
Consumo 3,7 l/100 km (mixto)
Tracción Delantera
Peso en vacío 1.325 kg
Número de asientos 5
Capacidad del maletero 521 l
Precio base 26.150 euros