Desde hace años, la Citroën Berlingo ha sido una elección perfecta para viajes en familia y también para trabajar. Por eso, cuando se anunció que se dejaban de comercializar las versiones de combustión y solo se mantenía la variante eléctrica, supuso un jarro de agua fría para muchos (no solo clientes, sino también concesionarios).

Pero al entrar en el configurador de la marca puedes ver que la furgoneta francesa continúa a la venta con el propulsor de gasolina 1.2 PureTech de 110 CV y el turbodiésel 1.5 BlueHDi de 100. ¿Qué ha pasado? Te lo explicamos a continuación.

Si te fijas, estas opciones térmicas van asociadas al apellido N1, es decir, se matriculan como vehículos comerciales ligeros, que tienen sus propias normas, algo diferentes a los turismos, como seguramente ya sabrás. 

Galería: Citroën Berlingo PureTech 130 EAT8 2020, guía de compra

Con riesgos y contratiempos, pero muy barata

Las principales restricciones son una velocidad máxima de 90 km/h, el paso de la ITV con más asiduidad (llega a ser cada seis meses en lugar de anual) y la instalación de una mampara de separación entre los asientos y la zona de carga. 

Si estás dispuesto a correr ese riesgo (el de la velocidad) y esos pequeños contratiempos (ITV y mampara), puedes comprar una Berlingo gasolina o diésel, ya seas cliente particular o profesional. El primero sí paga el IVA, mientras que el segundo está exento.  

Los precios comienzan en tan solo 19.970 euros más IVA en el caso de la versión Live Pack Business PureTech 110 S&S. Por el turbodiésel más barato, hay que abonar 20.739 euros más IVA. Sin duda, son tarifas que, ahora mismo, no tienen rival a la hora de comprar un coche familiar. 

Un aliado familiar de primera

Este vehículo es ideal para llevar a toda la 'tropa', pues incluye tres asientos individuales, dos puertas laterales correderas, así como un gran maletero de 775 litros. Todo, en un conjunto de apenas 4,40 metros de longitud. 

Además, la plataforma EMP2 de la Berlingo es la que emplea el C5 Aircross y se traduce en un comportamiento del nivel de un turismo, con una perfecta estabilidad lineal a velocidades de crucero y un guiado sencillo en curvas. En fin, sabemos que un vehículo N1 no es la opción perfecta, pero por ese precio no vas a encontrar nada parecido.