Por alguna extraña razón que todavía no acabamos de comprender, en la era de la ecología, el respeto al medio ambiente y los coches 'eco friendly', la realidad es que los automóviles son cada vez más grandes, pesados e ineficientes. El dominio absoluto de los modelos SUV es, desde luego, lo contrario a la eficiencia.

El gigante coreano Hyundai, no obstante, cree que el futuro pasa también por conservar en su gama los modelos urbanos, utilitarios y compactos, es decir, los más pequeños del catálogo, que seguirán a la venta al menos durante una nueva generación.

Galería: Prueba Hyundai i20 N 2022

Así lo ha confirmado el responsable del fabricante en Europa, Michael Cole, quien aprovechando el debut del nuevo Hyundai KONA, charló con la revista británica Autocar y anunció los planes de la compañía de lanzar nuevas generaciones de sus modelos i10, i20 e i30.

Este anuncio llega precisamente en un momento en el que otros grandes fabricantes están empezando a eliminar gradualmente de sus gamas los coches compactos y subcompactos, centrándose principalmente en modelos SUV y en segmentos superiores que, como es lógico, dejan más margen de beneficio.

"Estamos planeando qué tendremos por debajo del KONA a largo plazo. De momento, los i10, i20 e i30 siguen en nuestros planes, incluso para una nueva generación. No queremos perder ningún cliente ni queremos abandonar a ningún grupo de clientes, así que tenemos que pensar sobre esos compradores de i10, i20 e i30", comentaba Cole.

Hyundai i10 2023

Hyundai i10 2023

Inevitablemente, estos modelos habrán de electrificarse por el camino para atenerse a las estrictas normativas de emisiones, y tarde o temprano tendrán que convertirse finalmente en vehículos 100% eléctricos

Y hablando de normativas de emisiones, es muy probable que supongan también la sentencia de muerte para el genial Hyundai i30 N, la versión deportiva del compacto coreano, que muy posiblemente no contará con una nueva generación.

En definitiva, lo más probable es que la normativa Euro 7 incremente el precio de los automóviles de forma notable y acabe con los modelos más pequeños, que son los de menor precio y los menos rentables para los fabricantes, lo cual es un auténtico sinsentido, ya que resultan la opción más racional e incluso la más eficiente.