El pasado 24 de febrero se cumplieron 40 años del estreno comercial del Peugeot 205. Este modelo fue muy importante en la historia de la firma del león, ya que pudo salvar de la quiebra a la compañía tras varios años difíciles.

Para relanzar Peugeot, Jean Boillot, miembro del Consejo de Dirección de la marca a finales de los años 70, propuso un coche urbano lo más polivalente posible, que tomó forma en el 205... y permitió a la marca cumplir todos los objetivos.

Un diseño que se ha convertido en una firma

Las líneas sencillas pero icónicas del Peugeot 205 contribuyeron a su éxito desde el comienzo. Para el diseño, se dejó de lado a Pininfarina, que se había encargado de los coches anteriores del fabricante, y la marca seleccionó a su equipo interno, dirigido por Gérard Welter, para crear un aspecto muy identificable.

1983 - Peugeot 205

La parrilla con lamas horizontales y la banda entre los pilotos traseros se han convertido incluso en firmas de diseño de todos los Peugeot posteriores. El diseñador Paul Bracq se encargó del interior... mientras que Pininfarina fue llamado para crear el Peugeot 205 Cabriolet.

El diseño no solo tenía que ver con las líneas exteriores, sino también con la habitabilidad. El Peugeot 205 era sin duda un coche urbano, pero espacioso, gracias sobre todo a la adopción de barras de torsión en el esquema de suspensión de la parte trasera, que liberaban más espacio.

La Peugeot 205 fête ses 40 ans
La Peugeot 205 fête ses 40 ans

Motores: una nueva era

El estreno comercial del Peugeot 205 se acompañó con la puesta de largo de los motores XU y, en particular, del XUD7, un motor de ciclo diésel de cuatro cilindros y 1,8 litros de cilindrada, con 60 CV de potencia, que cambió las reglas del juego, ya que convirtió al 205 en el primer coche urbano francés en ofrecer un motor de gasóleo con prestaciones equivalentes al de gasolina, pero con unos consumos inferiores.

Peugeot 205 GTI 1988

El Peugeot 205 también se convirtió en una leyenda gracias a sus versiones más deportivas, naturalmente con las variantes GTI y Turbo 16, que alcanzaron hasta 200 CV, pero también el más civilizado y accesible 205 Rallye.

Las diferentes versiones se multiplicaron durante los 15 años de existencia del modelo, como la Junior de 1986, ¡que incorporaba asientos con tela vaquera! Todo un guiño a los clientes más jóvenes de la marca francesa.

Una comunicación exitosa

Crear un buen coche está muy bien, pero hay que saber venderlo. También en este caso Peugeot acertó con campañas de comunicación eficaces. El apodo de "Sacré numéro" (número sagrado) apareció nada más lanzarse y los anuncios de los años 80 reflejaron fielmente esos mensajes.

El Peugeot 205 también se benefició de su influencia en los deportes de motor con una versión del mítico Grupo B, con el Turbo 16  que participó en el Campeonato del Mundo de Rallies, con títulos mundiales para el fabricante y para dos de sus pilotos, Timo Salonen en 1985 y Juha Kankkunen en 1986.

Peugeot 205 T16 Groupe B

El éxito continuó en el París-Dakar con dos victorias, una para Ari Vatanen, ya el primer ganador con el 205 en rallies, en 1987, y luego con Juha Kankkunen al año siguiente. En 1988, una versión más grande y poderosa del Peugeot 205 ganó Pikes Peak con Vatanen.

Tras su lanzamiento, el Peugeot 205 solo experimentó una ligera remodelación en 1990. Fue sustituido por el 206 en 1998, tras vender la friolera de 5.278.050 unidades. Por nuestras carreteras, todavía se puede ver algún ejemplar rodando, lo que demuestra su fiabilidad mecánica.