Hay muchas razones para enamorarse del Mercedes-AMG SL, pero el principal motivo, al menos para los más puristas, sin duda ha de ser el motor V8 biturbo de 4,0 litros que esconde el SL 63 bajo el capó, aún sin electrificar, rebosante de rendimiento y de brutal sonido.

A pesar de todo lo que ofrece de serie la versión V8 del descapotable alemán, el preparador Manhart Performance ha 'metido mano' al coche para exprimir todavía más potencia y prestaciones del motor de ocho cilindros.

Además, Manhart también propone la característica estética de todas sus preparaciones recientes, gracias a una carrocería pintada de negro, con franjas y detalles dorados, un kit de carrocería algo más agresivo y un juego de llantas en diseño propio, por ejemplo.

La preparación en cuestión se llama Manhart SL 800 R, y te puedes hacer una idea de por qué se ha elegido esa cifra. Gracias a nuevos turbocompresores, un nuevo intercooler o un sistema de admisión de carbono, ahora la potencia del V8 alcanza los 800 CV.

Mercedes-AMG Manhart SL 800 R

El bloque biturbo, que de serie ofrece 585 CV y 800 Nm, tras pasar por las manos de Manhart también desarrolla un impresionante par motor máximo de 1.000 Nm, y suponemos que parte de esta mejora se consigue también mediante cambios en la gestión electrónica del propio propulsor.

El preparador tampoco ha ofrecido datos sobre prestaciones, aunque suponemos que el aumento de rendimiento debería mejorar también la aceleración de 0 a 100 km/h e incluso la velocidad punta, de 3,5 segundos y 315 km/h, respectivamente.

Entre otras modificaciones destacan un kit de suspensión que rebaja la altura de la carrocería, aunque por alguna razón, Manhart todavía no ha ofrecido apenas información al respecto.

Tampoco se ha anunciado un precio para la preparación, así que por ahora habrá que esperar para conocer toda la información sobre este salvaje Manhart SL 800 R, del que la compañía ya acepta pedidos.