Muchas personas esperan a los domingos para poder lavar su coche tranquilamente, sin ningún tipo de prisa. Otros dejan que la naturaleza haga su efecto bajo la premisa de que el cielo está muy oscuro y seguro que, si lo lavan, lloverá.
Sin embargo, los hay más reacios todavía y dejan de limpiar su automóvil durante más de dos décadas, como le ha pasado a este Pontiac LeMans de 1969. El clásico estadounidense ha estado durante 22 años en un garaje sin recibir ni una sola gota de agua y jabón.
Galería: Pontiac LeMans de 1969 sin lavarse durante 22 años
El Pontiac de la época estaba disponible en diferentes estilos de carrocería, pero nuestro protagonista es un descapotable con capota blanca, o al menos así era antes. El polvo ha pasado factura, y en nada se asemeja el tono actual con el que podía haber lucido por las carreteras de la Ruta 66.
En el vídeo, cortesía de Larry Kosilla y su canal de YouTube, AMMO NYC, se puede apreciar lo desgastado que se encuentra el Pontiac, y también el proceso de intentar devolver el esplendor que caracterizaba al coche hace ya más de 40 años.

La propietaria del vehículo defiende que no puede desprenderse de él porque se trata de su primer automóvil, por lo que el valor sentimental es incalculable. Con algo de suerte, podría conseguir que fuera restaurado y que lograra volver a la vida, justo el objetivo que pretendía cumplir AMMO NYC.

En el garaje de AMMO, el coche se sometió a un lavado preliminar, para quitar la primera capa de suciedad. La capota recibió un tratamiento desengrasante y, sorprendentemente, recuperó bastante bien el tono blanco original, incluso en el primer intento.

Un poco de jabón y trabajo de cepillado, y el exterior quedó similar al que tenía allá por 1969. Lo más complejo fue la parte inferior, desgastada por el óxido y, lógicamente, es casi imposible que el Pontiac fuera el mismo, pero la labor de restauración de la carrocería fue impecable.

Tras la limpieza, el vehículo se llevó a North American Motor Car para intentar ponerlo de nuevo en marcha. El vídeo concluye sin resolver el misterio de si regresó al asfalto, aunque viendo cómo se las gasta Larry, es probable que pueda hacer rugir de nuevo el motor de este clásico.

Fuente: canal de YouTube de AMMO NYC