Como muchos de vosotros sabéis, las subastas de automóviles pueden llegar a ser muy intensas. Si nunca has estado en una, es difícil describir el ambiente que se vive, pero todo va muy rápido de principio a fin. Y eso vale para cualquier tipo de subasta, incluidas las de coches de colección más importantes, como las de Mecum, donde el ritmo se mezcla con el precio y la pasión.

No se trata de automóviles generalistas, incluidos en grandes lotes de modelos usados. Hablamos de valiosos vehículos con historia, muy apreciados por compradores entendidos en la materia y por vendedores encargados de ofrecer un coche en estado impecable.

Desafortunadamente, ese ritmo elevado, que roza la locura, a veces puede cobrarse alguna víctima, como se ve aquí con un muy bien restaurado pick-up Chevrolet C10, de 1980, con dos ruedas motrices. Te dejamos la galería de otro pick-up Chevrolet modificado:

Galería: Icon 4x4 Chevrolet Thriftmaster

El valor económico de estos 'Chevy' de carrocería cuadrada han aumentado significativamente en los últimos años, y este apareció en la subasta de Mecum, celebrada en Dallas, a principios de septiembre. Desafortunadamente, en algún momento de su itinerario hasta llegar al escenario principal de la subasta, el capó se dobló considerablemente, presumiblemente a consecuencia de cerrarlo de forma forzada.

Curiosamente, estos modelos son conocidos por este tipo de problemas, pero ¿que ocurra justo antes de ser el centro de atención en una subasta televisada? En ese caso, como mínimo, hablamos de mucha mala suerte.

Llegados a ese punto, parte del misterio era averiguar cómo ocurrió exactamente, porque hay algunas teorías que ya circulan por la red. Esto fue lo que dijo el locutor en el vídeo mientras el pick-up se acercaba al escenario:

"Mientras estaba en el carril de preparación, el capó se dobló al cerrarse, como se puede ver. El vendedor cubrirá hasta $1,500 para el reemplazo del capó y la pintura".

Basándonos en esa información, todo apunta a que fue el vendedor el que dobló el capó al cerrarlo. Sin embargo, ¿se permite a los propietarios de los vehículos entrar en la zona de preparación antes de la subasta? ¿Acaso un comprador potencial dañó el capó al intentar cerrarlo? ¿O un empleado de Mecum dobló el capó mientras lo cerraba, camino del escenario, como sugieren varios comentarios del vídeo?

Icon 4x4 Chevrolet Thriftmaster

Nuestros compañeros de Motor1.com Estados Unidos se pusieron en contacto con Mecum Auctions para confirmar lo sucedido, ya que hacer que el dueño pague por el error de otra persona no parece nada justo.

Y la respuesta que obtuvieron fue que ningún empleado de Mecum dañó el pick-up en el proceso de venta. Según parece, el comprador y el vendedor del Chevy resolvieron el problema con una suma acordada de 1.500 dólares para reparar la camioneta.

Icon 4x4 Chevrolet Thriftmaster

Como vemos, el resultado final no disuadió al nuevo comprador, fascinado con el motor LS V8 de 5,3 litros instalado bajo el capó y una llamativa suspensión rebajada, entre algunas de las modificaciones efectuadas en el proceso de restauración. Así que podemos decir que el misterio se resolvió y todos quedaron contentos.

Fuente: Mecum Auctions, vía YouTube