Después de muchos rumores, parece que el Toyota Corolla GR de altas prestaciones llegará a finales de 2022. Así lo ha dicho la prestigiosa publicación Forbes, que ha añadido que el modelo japonés también contará con versiones de hidrógeno en los próximos años. 

Si comenzamos por la opción deportiva, exclusiva para la carrocería de cinco puertas, supuestamente adoptará el motor y la tracción 4x4 del fantástico GR Yaris. Hablamos de una mecánica turbo de gasolina, con tres cilindros en línea, que cubica 1,6 litros y desarrolla 261 CV y 360 Nm.

No obstante, hace tiempo que llegó otro rumor desde Japón que aseguraba que este propulsor tendría más potencia, hasta rozar los 300 CV. Por supuesto, el cambio será manual de seis velocidades.

En cuanto a las variantes de hidrógeno, no emplearán un motor eléctrico y una pila de combustible tradicional, sino que ese elemento químico será el encargado de alimentar un propulsor de combustión, como si fuera gasolina o gasoil. Según Toyota, esta solución apenas emite dióxido de carbono (CO2) y óxido de nitrógeno (NOx).

Esta opción ecológica se estrenará en el Prius a finales de 2022 con un sistema híbrido. Más adelante, habría un híbrido enchufable alimentado con hidrógeno. El Corolla con esta solución tecnológica aterrizaría en 2023.

Lo que no está claro es cómo pretende la firma japonesa hacer frente a la falta de una infraestructura de repostaje de hidrógeno para estos vehículos. Lamentablemente, en España la falta de hidrogeneras es patente y no parece que vaya a producirse un rápido desarrollo en los años venideros.

Queda ver si todas estas informaciones se convierten en realidad, así que habrá que esperar un poco más para que Toyota diga algo al respecto. Si dentro de unos meses cazamos unidades de pruebas del Corolla camufladas, será una buena señal...

Por cierto, la compañía asiática se adentrará en el mundo eléctrico con el SUV bZ4x, que saldrá a la venta en 2022. De momento, no hay ningún dato técnico confirmado, así que también tenemos que ser pacientes con este vehículo.

Fuente: Forbes