Por fin hemos conocido el C_Two matriculable. La marca croata de hipercoches Rimac Automobili presentó el prototipo hace algo más de tres años y ahora desvela el modelo de producción, el Rimac Nevera.
Aunque habrá alguna que otra mofa con el nombre en nuestro país, hace referencia a una tormenta mediterránea. Esta anécdota queda en un segundo plano al conocer todos los datos técnicos de un modelo eléctrico realmente apasionante.
El Nevera ha recibido multitud de cambios desde sus inicios, lo que ha dado como resultado un aumento del 34% en la eficiencia aerodinámica, en comparación con los primeros prototipos. Así, la activación del modo Low Drag reduce el coeficiente Cx a 0,30, mientras que el programa High Downforce aumenta la carga aerodinámica en un 326%.
La carrocería también ha sido cincelada para optimizar la refrigeración del tren de potencia y los frenos. A bajas velocidades, se ha conseguido mejorar esta variable en un 30%, que se queda en un 7% a ritmos mayores.


El rival del Pininfarina Battista es el segundo coche de producción de Rimac y puede presumir de cuatro motores eléctricos, uno en cada rueda, que generan 1.940 CV (1.427 kW) y 2.360 Nm combinados.
Con estas cifras, no nos extraña que el Nevera acelere de 0 a 100 km/h en menos de 2,0 segundos. Concretamente, en 1,97. ¿Te imaginas el empuje que debe proporcionar este coche? No apto para cualquier cuello...
Rimac ha explicado que este tiempo se consigue en superficies de alta fricción. Lo mismo sucede con los 9,3 segundos que necesita el coche para alcanzar los 300 km/h desde parado. Aún hay más, porque el Nevera solo tarda 8,6 segundos en completar el cuarto de milla (402 metros) y alcanza una velocidad máxima de 412 km/h. Absolutamente demencial...

Al tratarse de un vehículo eléctrico que prioriza las prestaciones sobre todo lo demás, la autonomía se resentirá notablemente al exprimirlo, algo que, por otro lado, también sucede en un hiperdeportivo con motor de combustión.
La batería tiene una capacidad de 120 kWh y permite homologar 550 kilómetros con una recarga completa en ciclo WLTP. Sin duda, parece una distancia suficiente para pegar unos cuantos 'acelerones' sin agotar el alcance. En fin, problemas de los megamillonarios...
Por supuesto, dicha batería admite carga rápida con corriente continua. En este caso, la potencia máxima es de 500 kW, con lo que, teóricamente, el Rimac Nevera solo necesita 22 minutos para recargarse del 0 al 80%.
Como curiosidad, la batería forma parte de la estructura monocasco de fibra de carbono del vehículo, con el objetivo de incrementar la rigidez estructural. Por cierto, el coche se va más allá de las dos toneladas de peso, 2.150 kilos, y la distribución de la masa es del 48% para el eje delantero y el 52% para el trasero.


Lógicamente, el equipo de frenos tiene que estar a la altura de las prestaciones disponibles. Por eso, el Rimac Nevera emplea discos carbocerámicos de la firma Brembo, con 390 milímetros de diámetro y pinzas de seis pistones.
Al parecer, el hiperdeportivo croata ofrece la mayor frenada regenerativa del mercado, que sale a relucir automáticamente cuando los frenos se acercan a su límite térmico. Sin duda, un apoyo extra perfecto para circuitos de velocidad.



Con una producción limitada a solo 150 unidades, el Rimac Nevera se ha desarrollado como un modelo global y costará 2 millones de euros. Cada uno de ellos estará firmado por el fundador y director general de la empresa, Mate Rimac.
Los clientes podrán elegir entre las versiones GT, Signature y Timeless, además de una edición Bespoke con mayores opciones de personalización. Rimac ha asegurado que no habrá dos coches idénticos.
Fuente: Rimac Automobili