Últimamente, la firma rusa Lada no para de generar noticias alrededor de su modelo más famoso y legendario: el Niva. Un todoterreno bastante básico en muchos sentidos, es cierto, pero que se muestra totalmente imbatible sobre nieve, hielo o campo a través.
En este sentido, primero te hablamos del Niva Travel, un SUV de enfoque más moderno, que da continuidad al Chevrolet Niva del año 2003, un crossover que nació fruto de una joint-venture entre General Motors y AvtoVAZ.
Y más tarde, nos centramos en la versión moderna del Lada Niva, llamada 4x4 Urban, que en su edición especial Black, se puede comprar muy barato en su mercado global: por menos de 7.500 euros. Pero también, del nuevo modelo previsto para el año 2024.
Galería: Prueba Lada Niva 4x4 FL 2020
Sin embargo, la noticia de hoy hace referencia a que el Niva vuelva a llamarse Niva, lo que parece una obviedad, pero no lo es. A fin de cuentas, como decíamos unas líneas más arriba, la denominación actual, 4x4 o 4x4 Urban, le restaba algo de 'épica' al modelo.
De este modo, tras la desaparición de la empresa conjunta que existía entre AvtoVAZ y Chevrolet, la empresa rusa le ha devuelto al todoterreno su nombre histórico.
Ahora bien, ¿qué ofrece este auténtico todoterreno, que está a la venta por menos de 7.500 euros? Pues si viajamos hasta un concesionario ruso, descubriremos algunos detalles interesantes.
Por ejemplo, que recurre a un más que probado propulsor 1.7 de gasolina, con arquitectura de cuatro cilindros y 83 CV de potencia, asociado a una caja de cambios manual de cinco velocidades y a un sistema de tracción permanente, dotado de un diferencial central. ¿Su labor? Repartir el par entre ambos ejes, de forma variable.


Ahora bien, cuando abandona el campo y se enfrenta al asfalto, su rendimiento baja, tal y como demuestran unas prestaciones un tanto mejorables: 142 km/h de velocidad máxima y 17,0 segundos para completar una infinita aceleración de 0 a 100 km/h.
Ahora bien, por lo que cuesta y viendo lo que ha nevado en este arranque de 2021, seguro que a más de uno le hubiera gustado tener un TT como este, aparcado en el garaje de casa, ¿verdad?