Ya han pasado 25 años y cuatro generaciones desde que apareció el Renault Mégane. Si tenemos en cuenta la vida media de cada entrega del compacto francés, de siete a ocho años, entonces al modelo actual, que se estrenó en 2016, todavía le deberían quedar unos años más antes de ser reemplazado.
Sin embargo, el próximo Mégane ya está en la línea de salida. Renault incluso ha anunciado oficialmente que será desvelado el año que viene, en 2021. Este anuncio se hizo con motivo de la presentación del concept Mégane eVision, que es el precursor del futuro compacto.


Basándonos en ese ejercicio de estilo, descubierto a mediados de octubre, y que ya nos da muchos detalles de lo que nos espera, hemos recreado el modelo de producción que podemos esperar. Eso sí, todavía hay una gran incógnita sobre la transición entre el Mégane equipado con motores térmicos y el Mégane 100% eléctrico.
En cualquier caso, este detalle debería tener una gran influencia en la apariencia del futuro compacto francés. Nuestra ilustración muestra varios códigos de diseño del concept Mégane eVision. Encontramos la firma lumínica curvada, con forma de 'gancho', que se puede intuir en varios modelos de Renault en la actualidad.
En el render, esas luces de conducción diurna son un poco más complejas que en el concept, dibujando una especie de 'S'. Las ópticas de iluminación frontal, que eran de ancho total en el Mégane eVision, se han reducido en esta versión de producción, que mantiene el imponente rombo de la marca en la parrilla.
A diferencia del frontal del Mégane eVision de una sola pieza, como suele suceder en la mayoría de modelos eléctricos, en este caso, la parrilla del futuro Mégane resulta más convencional, lo que le aporta un innegable aire deportivo, unido a los anchos pasos de rueda. Las imponentes llantas de 20 pulgadas ponen la guinda al pastel.
Si nos fijamos en las dimensiones, el concept eVision mide 4,21 metros, mientras que el Mégane actualmente en el mercado llega a 4,36 metros. Eso significa que es 15 centímetros más corto. Suponemos que el modelo definitivo de producción tendrá una longitud intermedia, pero estamos seguros de que el espacio interior será más amplio que en el Mégane actual. Eso se debe a que el Mégane eVision, al tratarse de un modelo 100% eléctrico, no tiene las mismas limitaciones que un vehículo con propulsor térmico.

Otros detalle curioso, típico de Renault, lo encontramos en los tiradores de las puertas traseras integrados en los pilares C, acentuando ese aire a carrocería coupé, tan popular en la actualidad. Sin embargo, el coche tiene cuatro puertas y un portón trasero. Tampoco conviene pasar por alto el diseño de 'techo flotante', que reduce la luneta trasera a la mínima expresión.
Queda por ver si el futuro Mégane será 100% eléctrico, cohabitando con la generación actual durante el tiempo que sea necesario, o si Renault planea seguir la vía abierta por Citroën con su nuevo C4, que está disponible tanto en versión térmica como eléctrica.

La primera alternativa parece la más probable, ya que el concept Mégane eVision se ha desarrollado sobre la nueva plataforma CMF-EV (Common Module Family- Electric Vehicles), creada para la movilidad eléctrica. Configurada en colaboración con Nissan, será usada por primera vez en producción en serie en el próximo Renault Mégane.

Integrando las baterías en el suelo del habitáculo, esta plataforma se adaptará a muchos vehículos de la gama Renault/Nissan: SUV, sedán, coupé... Como se mencionó anteriormente, asegura más espacio dentro del coche, incluso si es más corto que antes, como en el caso del Mégane.
Como recordatorio, el Mégane eVision cuenta con un motor eléctrico de 160 kW (217 CV) que impulsa las ruedas delanteras. Por el momento, no conocemos la autonomía máxima de su batería.