En Mercedes-AMG, cuando un coche lleva varios años en el mercado, en lugar de sacarlo del catálogo, suelen mejorarlo. Así sucede con el GT, presentado en el salón de París de 2014. Este superdeportivo aún tiene cuerda para rato, como queda demostrado con las mejoras que acaba de recibir.
La verdad es que todavía estamos atónitos con el GT Black Series, que desarrolla nada menos que 730 CV, pero aquí vamos a analizar la versión más 'terrenal', cuyo motor de gasolina 4.0 V8, biturbo, pasa de 476 a 530 CV. Sin duda, se trata de un notable incremento de potencia.
Grandes datos para la versión de acceso al biplaza. De este modo, aquellos clientes que deseen un plus de prestaciones, deben fijarse en el GT R, con 585 CV, en el GT R PRO, enfocado a circuitos de velocidad (también con 585 CV), y en el Black Series antes comentado.
También resulta muy interesante el ampliado equipamiento de serie, en materia de chasis. Así, no hay pagar un plus por la suspensión adaptativa AMG RIDE CONTROL, el diferencial trasero autoblocante con control electrónico, los discos carbocerámicos ni las pinzas de frenos rojas.
En opción, queda el sistema de dirección a las cuatro ruedas, que giran en el mismo sentido o en el contrario que las delanteras, para optimizar el dinamismo a altas velocidades y reducir el radio de giro en la ciudad.
Por supuesto, se mantienen las dos carrocerías antes existentes, la cerrada Coupé y la descapotable Roadster. La que desaparece es la versión GT S, debido al incremento de potencia de la opción 'básica'.
En el mercado alemán ya hay precios del Mercedes-AMG GT, que comienzan en 119.079 euros para la variante cerrada y en 130.679 euros para la cabrio. En España, estas tarifas se incrementarán ligeramente, tal y como sucede con otros modelos de la compañía.
En principio, si la pandemia nos respeta mínimamente este otoño, el biplaza se pondrá a la venta el próximo mes de noviembre. Multimillonarios, aquí tenéis vuestro próximo coche para disfrutar...