El Toyota Land Cruiser es uno de los pocos todoterrenos auténticos que quedan en el mercado, y es también uno de los más longevos. De hecho, no hay más que ver el FJ40 de las fotografías, obra del especialista Legacy Overland (Connecticut, Estados Unidos), que lo ha restaurado para dejarlo casi como recién salido de fábrica, o mejor todavía, si cabe.
Este proyecto de FJ40, basado en un ejemplar de 1984 del mítico 4x4, luce un color de carrocería marrón Desert Storm, pero lo más interesante está bajo su piel y, por tanto, no queda a la vista. Hablamos de cambios mecánicos, sobre todo, aunque no obstante, la estética de este clásico japonés es realmente interesante.
Galería: Legacy Overland Toyota Land Cruiser FJ40
Para empezar, incorpora nuevos faros con tecnología de tipo LED, paragolpes metálico delantero con argollas de remolque, faros antiniebla amarillos, parrilla al estilo de modelos más tardíos, un foco auxiliar trasero, una lata de gasolina (10 litros) pintada a juego con la carrocería, componentes de suspensión Old Man Emu, ballestas de 2 pulgadas, amortiguadores 'Terrain Tamer'...
Además, las llantas de acero son de 16 pulgadas, en un diseño similar a las de origen, con tapacubos cromados (también como los originales), y están calzadas con unos neumáticos todoterreno BFGoodrich (Mud/Terrain KM3), en medidas 285/75 R16.
A todo esto hay que sumar discos de freno en ambos ejes, discos también para el freno de estacionamiento, dirección asistida, un depósito de combustible fabricado a medida, techo rígido 'hard top' y puertas traseras batientes, entre otras cosas.
Dando vida al modelo encontramos un nuevo motor V8 'small block' de gasolina, de 5,7 litros y originario de General Motors (el gigante americano los vende sueltos, para creaciones de este tipo o restauraciones), con un carburador Weber 600 y asociado a una transmisión automática Edelbrock 700R4, de cuatro velocidades. Lo que no sabemos son cifras de potencia, par o prestaciones.
El habitáculo tampoco se queda corto, ya que se ha puesto ligeramente al día, aunque manteniendo el estilo clásico, como debe ser. Incorpora, por ejemplo, revestimientos para los asientos, las puertas, la guantera o el salpicadero, así como unas alfombrillas especiales, fabricadas en un material de vinilo que resulta fácil de limpiar y mantener.
Por último, en lo que a comodidades se refiere, incorpora desde aire acondicionado hasta un equipo de sonido RestroSound Long Beach, que incluye conectividad Bluetooth, radio digital Sirius XM, cuatro altavoces Pioneer o puertos USB para carga de dispositivos, por ejemplo.