Seis décadas después del lanzamiento del modelo original, la firma americana presentaba el pasado verano su nuevo Chevrolet Corvette, la generación C8, que por primera vez en su historia recurre a una configuración de motor central.
Aunque de serie su motor 6.2 V8 atmosférico ofrece unos respetables 502 CV de potencia, Hennessey Performance ya está preparando una versión mucho más salvaje, el llamado HPE 1200, que como su nombre indica, pretende alcanzar una potencia ligeramente superior a los 1.200 CV.
¿Cómo? Pues, en línea con lo que acostumbra la marca, equipando un sistema de doble turboalimentación en el bloque LT2 de General Motors que, como hemos dicho, de serie es atmosférico. Además, Hennessey añade pistones forjados de aluminio (con una relación de compresión de 10,0:1) y bielas de acero forjado.
Como es lógico, también hace falta una mejora en la caja de cambios automática de doble embrague, con el objetivo de reforzarla de cara a la fuerza bruta del 'renovado' motor de ocho cilindros.
En caso de que 1.200 CV sean demasiados, la compañía de John Hennessey también ofrecerá una preparación con unos 710 CV, ya que, en este caso, el V8 se conforma con estar sobrealimentado por un compresor volumétrico, en lugar de por dos turbos.
Para complementar la preparación mecánica, Hennessey está trabajando también en un kit de carrocería fabricado en fibra de carbono, que incluye un splitter frontal y un alerón trasero, por mencionar un par de ejemplos.
En el catálogo no faltarán tampoco un equipo de frenos mejorado, firmado por Brembo, un sistema de escape de acero inoxidable o una suspensión ajustable Penske, así como diferentes combinaciones de llantas y neumáticos.
Por ahora no se han anunciado cifras de prestaciones, aunque teniendo en cuenta que el Corvette C8 de serie despacha el 0 a 100 km/h en el entorno de los 3,0 segundos, seguro que esta bestia tejana no será precisamente lenta.