La inesperada muerte de Sergio Marchionne, durante el pasado verano, conmocionó al mundo del automóvil. Y, aunque el deterioro de su salud le obligó a abandonar el cargo de CEO del Grupo FCA (Fiat Chrysler Automobiles) y el de CEO y presidente de Ferrari, días antes de su muerte, la noticia pilló por sorpresa a casi todo el sector. 

De hecho, incluso dentro de FCA, se desconocían sus problemas de salud. Y no fue hasta el 20 de julio cuando se hizo público su estado y, al día siguiente, cuando se nombró a su sucesor. Ferrari hizo lo propio, ascendiendo a Louis Carey Camilleri al puesto de CEO y nombrando a John Elkann presidente.

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En una amplia entrevista con nuestro compañeros de Motor1.com Italia, Piero Ferrari, hijo del fundador de la marca, actual vicepresidente y dueño del 10% de la compañía, habla de sus experiencias y encuentros con Marchionne, que trabajó duro para convertir a la compañía de superdeportivos italiana en lo que es hoy en día.

Sergio Marchionne

Una historia de trabajo duro

Piero habla claro sobre la "determinación", la ética del trabajo duro y la toma de decisiones sensatas de Marchionne. Piero recuerda invitar a Marchionne a cenar los fines de semana, pero el mandatario declinaba cortesmente su propuesta, cada vez que se lo comentaba. Siempre tenía algo que hacer.

Marchionne era dueño de varios Ferrari, según el propio Piero, pero el vicepresidente cree que muchos de los integrantes de la colección tienen muy pocos kilómetros en el marcador. 

Otro aspecto que resalta el hecho de que Marchionne fue el tipo de persona que daba respuestas directas, con simples sí y no. Además, aunque era un tipo de finanzas, se tomó el tiempo necesario para conocer el producto antes de tomar decisiones importantes.

Sergio Marchionne

Si bien gran parte de la entrevista trata de la relación de Piero con Marchionne, como amigo y colega, Ferrari también habló sobre el futuro de la firma de Maranello y cómo el desaparecido directivo dio forma a la empresa para seguir adelante. De hecho, una de sus última tareas fue la elaboración del plan de negocio de la compañía para los próximos cuatro años.

Piero incluso habló sobre el próximo SUV del 'Cavallino': el Purosangue. Dijo que sería un Ferrari con cuatro puertas y que "no se parecerá al resto de SUV existentes en el mercado".

Cuando Marchionne murió, los reconocimientos no solo llegaron desde la industria automovilística o desde los deportes del motor; también, desde el sector tecnológico, incluyendo a Tim Cook, CEO de Apple.

Y no es de extrañar, ya que Marchione convirtió a Ferrari en un fabricante de deportivos de referencia, sacó a Fiat, y luego Chrysler, de la ruina y dejó un legado que será recordado durante años en el mundo del motor.

Con información de Flavio Atzori.