Mezcla de elegancia y deportividad, el Talbot-Lago T150-C SS, supuso una de las cumbres del automovilismo francés, antes de la Segunda Guerra Mundial. Presentado en el salón de Nueva York de 1937, el coche lucía unas líneas espectaculares en aquella época, algo que le valió para ganarse el apodo de "gota de agua".

Incluso, hoy en día, siguen sorprendiendo las curvas de su carrocería y una silueta que está considerada una de las grandes obras de arte de la automoción.  

Talbot Lago T150-C SS Teardrop de 1937

Tan solo se fabricaron 25 unidades del Talbot-Lago T150-C SS, la mayoría carrozadas por Figoni y Falaschi. Y entre ellas, tan solo se ensambló una unidad con las ruedas delanteras 'carenadas', lo que aumenta aún más la exclusividad y el valor de este coche clásico. De acuerdo con la compañía Sotheby RM, el valor que podría alcanzar esta unidad en la subasta de Villa Erba, el 27 de mayo, oscilará entre los 3,2 y los 3,8 millones de euros. 

Talbot Lago T150-C SS Teardrop de 1937
Talbot Lago T150-C SS Teardrop de 1937

Escondido durante la guerra, esta unidad con el chasis número 90110, no ha tenido una vida sencilla. En 1946 lo adquirió un comprador suizo que lo transformó en cabrio (este tipo de cambios eran muy habituales en la época). El coche se vendió de nuevo en 1966 y una vez más, en 1987, año en el que recayó en manos de su actual propietario. 

En el año 2000 se decidió dar al coche su aspecto original de nuevo. La operación se realizó en el taller Auto Classique Touraine, encargado de recrear una carrocería idéntica a la del modelo original, en el momento de su lanzamiento. ¿Lo mejor? El chasis, el motor y las suspensiones de este Talbot-Lago T150-C SS son los originales... y se encuentran en perfecto estado.

Fuente: Motor1.com

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