Hoy en día el clásico sedán o berlina de tres volúmenes es una especie en peligro de extinción ante el exceso de modelos SUV en el mercado, pero la situación era bien distinta en los años 80, cuando la oferta de este tipo de coches resultaba bastante amplia, incluso entre los modelos utilitarios, como el Volkswagen Derby o el Opel Corsa TR.

Es también el caso del Ford Orion, lanzado en el verano de 1983, hace ya 40 años, y que a pesar de su nombre, que hacía pensar en un diseño futurista, resultó ser un modelo bastante conservador, pensado quizá para los clientes que veían el Escort Mk3 o el Sierra como coches demasiado atrevidos a nivel estético.

Galería: Ford Orion (1983-1993)

El Ford Orion estaba por tanto dirigido a los compradores que seguían siendo fieles al Taunus (cuya zaga era muy parecida) y, de hecho, en una década se vendieron medio millón de ejemplares en Europa, tanto en Gran Bretaña como en Alemania (incluida la RDA) o España, entre otros mercados.

Este modelo, basado en gran parte en el Ford Escort, debía cubrir el hueco entre el Escort y el Sierra. Existieron dos generaciones, hasta su desaparición en el año 1993, aunque desde 1990 el modelo era, de facto, un Escort de tres volúmenes. Ambos medían alrededor de 4,23 metros de largo, con 2,40 metros de batalla inicialmente y 2,52 más tarde. 

Ford Orion (1983-1993)

Ford Orion (1990)

En el catálogo, Ford destacaba principalmente la amplitud y el maletero de 451 litros del modelo. Incluso la versión básica ofrecía un respaldo abatible. A diferencia del Escort, el Orion, que inicialmente pesaba bastante menos de una tonelada, nunca estuvo disponible en el acabado más bajo de la gama.

La versión superior era el deportivo Orion Injection con el motor 1,6 litros de inyección del Escort XR3i. "Dinámica con aspecto civil" era la florida descripción del folleto. En el otro extremo de la escala se encontraba el motor de gasolina de 1,3 litros con 69 CV (posteriormente 60) y, a partir de diciembre de 1983, el diésel atmosférico de 54 CV de Klöckner-Humboldt-Deutz.

Ford Orion (1983-1993)

Este último tardaba 19,1 segundos en alcanzar los 100 km/h desde parado, pero también consumía solo unos 5,5 litros de media. Los que realmente querían el cambio automático de tres velocidades lo conseguían con el 1,6 litros de 79 CV.

A principios de 1986, se llevó a cabo al mismo tiempo un restyling que incluía un habitáculo modificado, y la lujosa versión de lujo Ghia también era nueva, así como algunos motores: un 1,4 litros con 73 CV, por encima del motor de 60 CV, y un 1,6 litros con 90 CV.

Volkswagen Apollo

Volkswagen Apollo

La primera generación del Ford Orion incluso mutó en un Volkswagen. En Sudamérica, Ford y Volkswagen habían fundado Autolatina, en 1985. Allí, el Orion se convirtió en el Ford Verona de dos puertas y, con un logotipo diferente, en el Volkswagen Apollo. Denominación por cierto, "Apolo", que había sido el nombre en clave del desarrollo del Orion. 

La segunda generación del Orion se dejó de fabricar en 1993. En los últimos años de producción, estaba equipado con un motor de gasolina de 1,8 litros y 130 CV. Al igual que los Volkswagen Derby/Polo o el Santana/Passat, el posterior Escort sedán vivió hasta 1998. Su sucesor fue el compacto Ford Focus.