Que el Mercedes-Benz Clase G es uno de los todoterrenos más valorados a lo largo de los años no es ninguna novedad. Al margen de su uso civil, muchos ejércitos y cuerpos de seguridad o de rescate lo han elegido para adentrarse por los escenarios más inhóspitos. 

En este sentido, el ejército argentino realizó hace unos días una demostración dinámica en las instalaciones de Campo de Mayo con diferentes Clase G transformados, que se han ganado una segunda vida de servicio.

En su gran mayoría son Mercedes-Benz Clase G, que componen una de las flotas más numerosas en las fuerzas armadas del país latinoamericano, aunque también se mostraron otros vehículos más antiguos.

Galería: Mercedes-Benz Clase G del ejército argentino

La presencia de los 230G en el ejército argentino se remonta a 1978. Y, ante el elevado coste para renovarlos, desde hace años las fuerzas armadas llevan tiempo trabajando para reacondicionarlos, actualizarlos y mantenerlos operativos.

Se estima que, en la actualidad, hay unos 700 ejemplares del Clase G al servicio del ejército. Estas tareas de recuperación y modificación las ha realizado un cuerpo específico de logística.

Las actualizaciones de los vehículos se han centrado, fundamentalmente, en aumentar la autonomía de los mismos y en mejorar sus aptitudes off-road (ya de por sí buenas), además de dotarlos con equipos de comunicación y armamentos más modernos.

Mercedes-Benz Clase G del ejército argentino

Una de las modificaciones más extremas las recibió un 230G BM7, que fue equipado con cuatro orugas de caucho sintético (con tres telas interiores de poliéster, tacos internos de tracción y guiado reemplazables en material plástico antidesgaste), para ser utilizado "en zonas de nieve o abundante barro".

"De esta manera, la rueda dentada de la oruga queda ubicada en el mismo punto original del vehículo y apoyada sobre el suelo. Además, se modificó su sistema de encendido y el de alimentación, empleando piezas del mercado local para facilitar así las tareas de mantenimiento".

En las instalaciones de Campo de Mayo también se presentó un Mercedes-Benz 230G BM10, que se modificó para su utilización como "vehículo de exploración, con capacidad para cuatro personas dotadas de fusil FAL y Amet MAG 7.62 con un campo de tiro a 360 grados".