Debes creernos cuando te decimos que descubrir el mundo de las furgonetas camper caseras y las autocaravanas artesanales es altamente recomendable (y a veces, también curioso y sorprendente).

Una tendencia que, en muchas ocasiones, nos muestra lo que de verdad valora la gente a la hora de disfrutar del tiempo libre con su vehículo recreativo. Eso sin lo que no pueden viajar o disfrutar de sus vacaciones.

Y en el caso de la Mercedes-Benz Sprinter que hoy te presentamos, una furgoneta modificada totalmente a mano, puedes descubrir lo que interesa y lo que no a sus propietarios... de manera bastante evidente.

Una Mercedes Sprinter camper, con canasta de baloncesto

De hecho, la pareja propietaria de esta Mercedes-Benz Sprinter modificada tiene una canasta de baloncesto desplegable, de altura totalmente reglamentaria, pero eliminó el inodoro original en favor de un cubo y algo de serrín. Cuestión de prioridades...

Galería: ARV Mercedes-Benz Sprinter Nelson camper

Como puedes ver en la galería superior, la Mercedes-Benz Sprinter es toda una referencia entre las 'furgos' camperizadas, como pueden ser la Fiat Ducato o la Ford Transit. Y en este caso, es la opción de Christian y Maci, que primero apostaron por un autobús escolar para su vida nómada y, después, por un más pequeño monovolumen.

Su vehículo actual ofrece una combinación de colores rojo y negro, empleando una pintura exterior especial, que asegura una mayor durabilidad. Por su parte, una escalera en la parte trasera permite acceder al techo, donde hay paneles solares y la mencionada canasta de baloncesto desplegable.

La decoración interior es brillante, con iluminación de color púrpura neón y paneles blancos en las paredes, con enredaderas falsas a lo largo de la parte superior de las mismas. Y las fotos familiares se cuelgan mediante un curioso sistema de imanes.

El vehículo tiene una cocina de dos fuegos, un fregadero y un pequeño frigorífico. Dos depósitos de 26,5 litros de agua les proporcionan agua fresca, mientras que hay numerosos cajones y armarios para el almacenamiento, además de una encimera extensible para la preparación de alimentos.

La pareja también creó un pequeño espacio para su hija. Su asiento infantil está allí, y tiene juguetes para pasar el rato. Y para acabar, en la parte trasera, está el espacio principal de la vivienda. Durante el día, hay un sofá y un sofá cama, y cuando se desea, se puede convertir toda esta zona en el propio dormitorio.