Las jaulas antivuelco se utilizan principalmente en los deportes de motor para proteger al ocupante (o a los ocupantes) de lesiones en caso de un vuelco, pero nuestros 'científicos' rusos favoritos, los de Garage 54, quieren dar un nuevo uso a este componente

En concreto, en su último experimento ha vuelto a emplear un Lada antiguo, al que han instalado unos raíles exteriores para que el vehículo dé una vuelta de campana sin que se produzca ningún desperfecto. 

Sin duda, se trata de un artilugio extraño, como cualquier otro de Garage 54, pero parece muy divertido. Desde luego, no te deberías perder el vídeo adjunto...

Galería: Lada con 300 bombillas de Garage 54

Primero, analicemos el Lada. Los mecánicos rusos han cortado el vehículo para reducir su distancia entre ejes y han elevado la distancia al suelo con el fin de facilitar el 'volteo'. 

También se ha eliminado el interior, dejando al conductor lo esencial, como un asiento con arnés, un volante y algunos elementos eléctricos. Se ha retirado el parabrisas por razones obvias, pero al menos hay un velocímetro colocado en una posición extraña.

En cuanto a la jaula antivuelco, estos chicos hicieron una de acero y la soldaron fuera del vehículo, en lugar de proponer la típica solución dentro de la cabina. Parece raro, pero es lo normal para estos tipos. El objetivo es que el Lada dé una vuelta completa hacia adelante, por lo que la jaula de acero fue diseñada para este fin.

El trabajo inicial consistió en un duro trabajo de equipo, volteando el Lada manualmente para que el conductor pudiera vivir la sensación de la acrobacia antes del experimento real. Después, tras unos cuantos intentos, los científicos lograron completar el giro completo, acelerando a todo lo que daba el coche y deteniéndose bruscamente para iniciar la vuelta.

Como siempre, no intentes replicar esta locura en casa. Todos sabemos que estos tipos hacen estas cosas en nombre de la ciencia, así que dejemos estas 'hazañas' a los profesionales.