Al hablar de la BMW C 400 GT, lo hacemos de un maxiscooter de éxito, nacido en 2018 y actualizado en 2021, que se ha posicionado como la opción de acceso a la gama BMW Motorrad, junto a su hermana, la C 400 X.

Algo que ha conseguido, en parte, ofreciendo lo que buscan muchos usuarios: una moto con la que moverse con agilidad por la ciudad... pero con la potencia necesaria como para no quedarse 'vendidos' fuera de ella, principalmente en vías interurbanas.

Y en ese sentido, juega un papel fundamental la actualización del motor, un monocilíndrico de cuatro tiempos y 350 cm3 (que la denominación comercial no te confunda), que entrega 34 CV de potencia a 7.500 rpm y 35 Nm de par máximo a 5.750 rpm. Además, tras la actualización, ya cumple con la normativa Euro 5.

Galería: Prueba BMW C 400 GT

Ahora, el propulsor anuncia un consumo de 3,5 l/100 km, emite menos y ofrece el par 250 vueltas antes, pero también estrena numerosas modificaciones técnicas y se asocia a un acelerador de tipo electrónico (o by wire). Todo esto se resume en una mejor respuesta, más inmediata.

Algo que se nota en ciudad, donde sigue siendo un vehículo ejemplar, pero también fuera de ella, donde permite viajar en cualquier escenario a la velocidad máxima estipulada para la vía (su máxima en ficha es de 139 km/h). Eso sí, tal vez se eche de menos un poco más de 'chispa' a la hora de recuperar desde velocidades medias.

En cualquier caso, el C 400 GT se defiende bien en todos los escenarios y el motor resulta especialmente poderoso a la hora de salir desde parado (bien en ciudad) o al incorporarse a vías rápidas.

Y en general, parece un modelo bastante cómodo, tanto por el confort que asegura el asiento (respaldo con la inscripción GT, incluido), como por la buena protección que garantiza la pantalla frontal. En nuestra unidad, tampoco faltaba la función de calefacción para el asiento y los puños o el arranque sin llave.

Dicho esto, las sensaciones son las de un maxiscooter bastante dinámico, tal vez, algo más que la media de la categoría (a pesar de sus 214 kilos de peso), de vivas reacciones y amortiguación firme, aunque sin llegar a resultar seco o incómodo. Sobre la frenada, tanto el tacto como la respuesta son buenas y la moto cuenta, por supuesto, tanto con ABS como con control de estabilidad.

Prueba BMW C 400 GT

En el aspecto más práctico, el pasajero también goza de un espacio razonablemente confortable, con un asiento mullido, unos generosos asideros y una superficie amplia en la que colocar los pies.

Pero bajo mi punto de vista, lo más llamativo del modelo es la inclusión del cuadro de mandos digital, una pantalla TFT de 6,5 pulgadas, realmente completa, que ofrece todo tipo de datos acerca de la conducción y conectividad total con el smartphone (incluyendo una sencilla función de navegación).

Prueba BMW C 400 GT
Prueba BMW C 400 GT

Otro punto característico de la moto es el denominado Flexcase, un ingenioso sistema de almacenaje bajo el asiento del conductor, que permite que la capacidad de carga aumente de 32 a 45 litros (eso sí, solo en parado), para guardar sin problema un casco integral. A pesar de ello, puede que la capacidad de almacenaje sea el mayor punto flojo de la moto.

Por lo demás, solo nos queda decir que la C 400 GT está disponible desde 7.990 euros y que, todo aquel que busque una opción más llamativa, puede optar por la C 400 X, con un aspecto más deportivo-todocamino, si nos permitís la expresión, que está a la venta desde 6.990 euros.

Prueba BMW C 400 GT

Nuestro agradecimiento a Medis Grupo por la cesión del equipamiento de moto empleado en esta prueba, compuesto por el casco GIVI X-21, la chaqueta HEVIK Portland y los guantes HEVIK ZEUS.

Galería: BMW C 400 GT 2021

BMW C 400 GT

Motor Gasolina, monocilíndrico, 350 cm³
Potencia 34 CV a 7500 rpm
Par máximo 35 Nm a 5750 rpm
0-100 km/h N.D.
Velocidad máxima 139 km/h
Consumo 3,5 l/100 km
Peso en vacío 214 kg
Número de asientos 2
Precio base 7.990 euros