Para muchos aficionados, uno de los deportivos clásicos de competición más añorados es el Ford Sierra RS500 Cosworth, perteneciente al Grupo A, que disputó distintas carreras. Pues bien, este modelo volverá a ser realidad en una tirada muy limitada.

Lo 'resucitará' la compañía británica CNC Motorsport AWS, en colaboración con el piloto y constructor de turismos Andy Rouse. ¡Qué gran noticia! La empresa montará solo tres ejemplares basados en las carrocerías originales del Sierra.

El primer ejemplar, cuya finalización está prevista para principios del año que viene, se fabricará con una carrocería completamente original, que lleva sin usarse desde la década de 1980. El plan es que los tres coches reciban la documentación necesaria para participar en eventos y carreras de históricos.

Galería: Ford Sierra RS500 Cosworth

Al igual que el modelo histórico, estas tres unidades se fabricarán según las especificaciones de Andy Rouse Engineering como coches de carreras del Grupo A, utilizando dibujos y datos originales.

No obstante, lo más impresionante es que cada unidad estará propulsada por un motor recién fabricado con la ayuda del constructor Vic Drake, que ha producido más de 100 propulsores RS500, con 575 CV.

Esta mecánica trabajará junto a un caja manual Getrag de cinco marchas y a un diferencial central viscoso. Los tres coches estarán acabados en color blanco, aunque opcionalmente se podrá pintar en ellos la decoración deseada. 

Casi todos los componentes de los nuevos Sierra RS500 Cosworth se construirán según las especificaciones exactas proporcionadas por Andy Rouse. Hablamos, por ejemplo, de los montantes de la suspensión delantera, los brazos traseros, el depósito de combustible e incluso el sistema de escape. El propio Rouse proporcionará la jaula antivuelco de acero.

"El RS500 era muy divertido y de todos los coches con los que corrí, el Kaliber RS500 es el que desearía seguir teniendo hoy en día", ha asegurado Andy Rouse. La única mala noticia de este artículo, además de la tirada tan limitada, es el precio de cada ejemplar: 185.000 libras esterlinas, casi 219.000 euros al cambio, sin incluir la decoración.