Continuamente lo decimos: tener mucho dinero no significa tener buen gusto. El último ejemplo lo protagoniza la mismísima Kim Kardashian West y su Lamborghini Urus peludo. Bueno, realmente es una tela con aspecto de pelo. 

¿Qué te parece esta curiosa personalización? A nosotros nos ha recordado la furgoneta que empleaban Jim Carrey y Jeff Daniels en 'Dos tontos muy tontos', con lo que no es precisamente un elogio. 

Al parecer, el motivo que ha llevado a la modelo y empresaria estadounidense a preparar así su flamante Urus es para promocionar su tienda, Skims. Dudamos mucho de que sea una buena campaña de publicidad, pero oye, a lo mejor lo hortera se lleva...

 

El Urus peludo lo publicó Kardashian en su Instagram. Si navegas por las imágenes (realmente deberías hacerlo), verás que esas telas con aspecto de piel también se han aplicado en el interior.

De este modo, los asientos, el volante e incluso las llantas están recubiertos de pelo. Casi con toda probabilidad, esta configuración no será legal en la calle, pero es, como mínimo, escalofriante.

¿Te imaginas la cantidad de suciedad que tiene que atrapar este coche en cualquier desplazamiento? Por no decir el calor que debe dar esta configuración peluda en los asientos durante los meses estivales... 

Para ser justos, este no es el primer vehículo de una 'celebrity' que da miedo. Por ejemplo, el Rolls-Royce personalizado de Justin Bieber también es una oda a la máxima excentricidad. 

En cambio, también hay famosos con coches realmente fantásticos. ¿Sabes por qué? Porque los han dejado de serie, tal y como los compraron en el concesionario. Si es que no hay que complicarse tanto la vida para acaparar la atención...