La Fórmula E se está convirtiendo en una competición cada vez más relevante. Prueba de ello, es la llegada en masa al certamen, en los últimos tiempos, de grandes fabricantes mundiales. Audi, por ejemplo, que fue el primer fabricante alemán en anunciar su entrada como escudería oficial, tras colaborar durante años con el equipo ABT Schaeffler Audi Sport. Una relación bastante fructífera, que permitió a Lucas di Grassi hacerse con el título la pasada campaña.
Pero... ¿quién es Schaeffler? El principal patrocinador de la escuadra en la categoría, así como el socio impulsor de este nuevo y salvaje proyecto, llamado 4ePerformance, en el que el proveedor automotriz se las apaña para montar el sistema de propulsión del monoplaza FE01 en un Audi RS 3 Sedan.

El resultado es un turismo eléctrico, con 1.180 CV de potencia (880 kW), que es capaz de alcanzar los 200 km/h en menos de 7,0 segundos. Impresionante...
Pero además de ser rápido, parece que también será bastante efectivo en circuito. Para ello, cuenta con cuatro motores de 220 kW (similares a los de la Fórmula E), uno en cada rueda, unidos en cada eje mediante una transmisión, que actúa como reparto selectivo de par.
Por supuesto, este esquema asegura contar con tracción total, mientras que de suministrar la energía al conjunto, se encargan dos baterías, una delantera y otra trasera, que suman una capacidad total de 64 kWh.

"Para Schaeffler, este vehículo es un laboratorio de pruebas sobre ruedas", afirmó Simon Opel, director de Proyectos Especiales de Motorsport, en la presentación del modelo. Lo malo, es que parece que este proyecto no se convertirá en realidad; simplemente, se trata de un ejercicio para demostrar que esta transferencia de tecnología, de los circuitos a los coches de calle, es posible. Una auténtica pena...
Fuente: Schaeffler Group, vía YouTube