Citroën Saxo VTS 1996
Aún pueden verse muchas unidades del deportivo francés, sobre todo, en el norte de España, lo que demuestra el éxito que cosechó hace dos décadas.
En el plano mecánico, se impulsaba con un motor atmosférico, de 1,6 litros y 120 CV, asociado a una caja manual de cinco marchas.
El Saxo VTS pesaba menos de 900 kilos y apenas medía 3,73 metros de longitud. Con estos registros, se entiende que alcanzase 205 km/h y firmase una aceleración, de 0 a 100, en 7,7 segundos.
Fiat Cinquecento Sporting 1994
Es el deportivo más veterano del listado y, probablemente, el más original. Algunos, incluso, lo calificarán como el más divertido.
La clave del vehículo residía en su bajísimo peso, apenas 727 kilos. Gracias a esta cualidad, no importaba que el motor, de 1,1 litros, tan solo desarrollase 55 CV, porque la diversión estaba asegurada.
No obstante, las prestaciones no eran nada del otro mundo: 149 km/h de velocidad máxima y 13,5 segundos en la aceleración de 0 a 100.
MINI Cooper S 2001
El modelo más exclusivo de este listado apareció al inicio del siglo XX, con un motor de 1,6 litros, sobrealimentado por un compresor volumétrico, de 163 CV y 210 Nm.
El deportivo británico, que registraba una longitud de 3,65 metros de longitud y un peso que apenas superaba los 1.000 kilos, detenía el cronómetro en 7,4 segundos, en la maniobra de 0 a 100 km/h. Además, la aguja del velocímetro podía marcar 218 km/h.
Peugeot 206 RC 2003
En el caso del deportivo francés, que se situaba por encima del GTI (138 CV), montaba un propulsor, de aspiración atmosférica, con 2,0 litros y 177 CV. Trabajaba junto a un cambio manual de cinco velocidades.
Las prestaciones resultaban destacadas, con una velocidad máxima de 220 km/h y una aceleración de 7,4 segundos. Para evitar disgustos, incluía el control de estabilidad ESP de serie.
Volkswagen Lupo GTI 2000
El benjamín alemán, de 3,52 metros de longitud, se beneficiaba de un motor de gasolina atmosférico, de 1,6 litros y 125 CV. Originalmente, montaba una caja manual de cinco velocidades, si bien, posteriormente, se sustituyó por otra de seis.
En términos de prestaciones, lograba una velocidad máxima de 205 km/h y aceleraba de 0 a 100 km/h en 8,2 segundos. Todo, gracias a un peso en vacío de 900 kilos.