BMW 303 (1933)
Esta primera calandra tan original y de grandes formas data de 1933 y fue incorporada por primera vez en el BMW 303.
Dividida en dos partes y colocada en posición vertical, su cometido era enfriar un motor de gasolina de 30 CV de potencia.
BMW 328 (1936)
Unos años después, la parrilla evolucionó hacia unas formas más limpias y estrechas, pero manteniendo la misma esencia hasta la década de los 50, en los modelos BMW 327 y 328.
BMW 327 (1938)
En este modelo, se puede ver esa misma calandra del 328, con lo que se seguía apostando por una imagen de marca estable.
BMW 501 (1952)
El tamaño de la calandra se redujo un poco más con la llegada de los BMW 501 y 503, que se estrenaron a principios de los años 50.
Eso sí, se mantenía todavía la verticalidad de los años anteriores, pero supuso un adelanto de los planes que había de seguir haciéndola cada vez más pequeña.
BMW 503 (1956)
Podemos ver cómo en el BMW 503 hay un importante cambio en el tamaño de la calandra.
BMW 1500 (1962)
En los años 60, las formas horizontales de la calandra le ganaron la batalla a las verticales...
BMW 2002 (1969)
... una dinámica que continuó a finales de la década.
BMW Serie 3 (1975)
Tras el modelo 2002, BMW lanzó el Serie 3 en 1975, con una calandra en el frontal que disminuyó drásticamente de tamaño.
A partir de ese momento, esta parrilla fue ganando centímetros en sentido horizontal, que en el caso de este modelo, nació con dos partes unidas y rodeadas por una marco cromado bastante grueso.
BMW Serie 3 (1984)
Con la llegada del BMW Serie 3 E30, la calandra perdió algo de altura, hasta colocarse en la misma línea que las ópticas principales.
Además, cada una de las dos partes que componían la parrilla quedaban divididas por un pequeño espacio, que fue haciéndose cada vez mayor con la llegada de los nuevos modelos germanos.
BMW Serie 3 (1995)
En esta nueva entrega, el doble riñón se ensanchó claramente y los faros también ganaron bastante tamaño.
BMW Serie 3 (2003)
Con la llegada del siglo XXI, poco a poco, la rejilla delantera empezó a cambiar, abandonando las líneas tan rectas. De esta manera, se fue evolucionando hacia un diseño más redondeado y atractivo.
BMW Serie 3 (2005)
Aquí, el doble riñón parece algo más oblicuo y con un reborde cromado no tan grueso.
BMW Serie 3 (2014)
Con la llegada de las nuevas generaciones de los modelos de BMW, la calandra siguió estirándose horizontalmente, llegando a juntarse con las ópticas principales, como es el caso del BMW Serie 3 F30, de 2014.
BMW Serie 3 (2019)
La nueva entrega del BMW Serie 3 ha seguido una evolución en dirección horizontal, con una parrilla que gana elementos con un tamaño mayor al de los faros delanteros, recuperando de nuevo la unión entre las dos partes que la conforman.
BMW Serie 4 (2021)
Con la presentación del BMW Concept 4, en Frankfurt, se hizo visible la inspiración del frontal en los modelos de antaño.
Lo podemos comprobar en los dos grandes riñones que incorpora y que se mantendrán en el BMW Serie 4 de producción, que llegará en unos meses al mercado.
Lo que está por ver, es si se utilizará este diseño en el resto de la gama.