Alfa Romeo Spider/GTV
Nuestro ranking con novedades de hace 25 años comienza con el Alfa Romeo Spider y su 'hermano cerrado', el GTV. Ambos modelos protagonizaron un notable cambio estético, respecto al antiguo Spider, con un diseño en cuña que ha aguantado muy bien el paso de los años.
Audi A4
Además del cambio del nombre, todavía en vigor, el sucesor del Audi 80 trajo consigo nuevos rasgos, mucho más modernos. En el momento del lanzamiento, la versión de acceso se impulsaba con un motor de gasolina, atmosférico, con 1,6 litros y 101 CV.
Audi A8
Audi protagonizó un salto de calidad en los años 80, pero no fue hasta la siguiente década cuando se puso a la altura de las mejores marcas Premium.
Gracias a un elaborado chasis de aluminio, el nuevo A8 causó sensación en 1994. De hecho, la variante de acceso a la gama no superaba las 1,5 toneladas.
Audi RS2 Avant
Fabricado gracias a una 'joint venture' entre Audi y Porsche, el familiar alemán ofrecía un motor turboalimentado de 2,2 litros y cinco cilindros en línea, con 315 CV.
Exactamente, se fabricaron 2.891 unidades del primer modelo de la familia RS. En aquel momento, era el coche más potente de Audi, hasta la llegada del S8.
BMW Serie 7 (E38)
Bajo nuestro punto de vista, esta berlina es uno de los representantes más elegantes de la lista. En términos estéticos, el coche, internamente conocido como E38, se basaba en su predecesor. Sin embargo, técnicamente, la electrónica cobró mucho más protagonismo.
En septiembre de 1994, este BMW fue el primer automóvil de un fabricante europeo que se ofreció de fábrica con un sistema de navegación.
BMW Serie 3 Compact
A veces, cuando uno arriesga, gana. BMW lo hizo creando un compacto a partir del Serie 3, 20 centímetros más corto que la berlina, que resultó muy atractivo para muchos clientes.
Este modelo es el germen del actual Serie 1. ¿Por qué no se llamó así hace 25 años? Habría que preguntar a los responsables de Marketing de BMW en aquella época...
Monovolúmenes Fiat-PSA
Por así decirlo, las furgonetas eran los SUV de los años 90. Casi todos los fabricantes se subieron al tren y, para ahorrar costes, el Grupo PSA y Fiat desarrollaron un cuarteto de modelos casi idénticos: Citroën Evasion, Peugeot 806, Fiat Ulysse y Lancia Zeta.
Ferrari F355
Seguro que los propietarios de la consola Sega Dreamcast recordarán este deportivo, que tuvo su propio videojuego. Este coche, con 381 CV, sustituyó al 348 y tuvo un gran éxito comercial, ya que se fabricaron más de 11.000 unidades hasta 1999; entre ellos, 2.663 Spider.
Ford Scorpio
Ese año también llegaron modelos peculiares, como el representante de la marca del óvalo, con una estética poco ortodoxa. La jugada no le salió bien a Ford, porque solo duró cuatro años en el mercado.
Opel Omega B
En vista de la catástrofe del Scorpio, la marca de Rüsselsheim posiblemente se alegró en secreto. El nuevo Omega B aglutinó a los clientes que buscaban una berlina con una enorme cantidad de espacio, a cambio un precio ajustado.
En la foto aparece el restyling de 1999. Después del final de producción en 2003, muchos lo siguen echando en falta.
Toyota RAV4
El segmento SUV comenzó con este coche. El Toyota RAV4 ofrecía tracción a las cuatro ruedas y un habitáculo elevado, pero un dinamismo mucho mejor que el de cualquier todoterreno.
Sencillo, práctico y asequible, este modelo continúa siendo el sueño de muchos clientes, aunque ahora se trata de un todocamino híbrido, con claros tintes familiares.
Volkswagen Polo III
Después de 13 años en el mercado, en 1994 salió a la venta la tercera entrega del Polo. Desde luego, la espera valió la pena, ya que por fin contaba con puertas traseras, así como airbags y sistema ABS.
Gracias a la riqueza del equipamiento opcional y a su nueva apariencia, este coche pasó a considerarse un pequeño Golf.