Alfa Romeo Stelvio Quadrifoglio - Ferrari
Aunque Ferrari ya no forme parte del conglomerado de FCA Group como tal, los vínculos empresariales siguen siendo intensos. Algo que salta a la vista, por ejemplo, con un todocamino como el Alfa Romeo Stelvio Quadrifoglio, que disfruta de un motor desarrollado por la factoría del Cavallino.
Alfa Romeo Stelvio Quadrifoglio - Ferrari
Al igual que sucede con el Alfa Romeo Giulia Quadrifoglio, el propulsor escogido en un 2.9 V6, biturbo, que entrega 510 CV de potencia.
Gracias a esta mecánica desarrollada por Ferrari, el Stelvio es uno de los SUV más rápidos del mundo, ya que alcanza los 283 km/h y acelera de 0 a 100 en 3,8 segundos.
Aston Martin DB11- Mercedes-AMG
Que un Aston Martin equipe un motor V8, en lugar de uno de sus famosos V12, ya haría dudar a muchos aficionados de la marca. Pero si encima procede de un modelo alemán, como sucede con el último DB11, es posible que se eche a reír.
Aston Martin DB11- Mercedes-AMG
Sin embargo, hace ya unos años, se anunció una colaboración entre Aston Martin y Mercedes-AMG, en materia de motores.
De este modo, el DB11 ha sido el encargado de estrenar esta nueva era, con el V8 4.0 biturbo alemán en sus entrañas. Una mecánica de 510 CV que le permite alcanzar los 300 km/h y acelerar de 0 a 100 en 4,0 segundos.
Citroën SM - Maserati
Presentado en el salón de París de 1970, muchos seguimos considerando al Citroën SM como uno de los coches más revolucionarios de todos los tiempos. De hecho, para explicar todas sus primicias, tendríamos que dedicarle un post completo...
Sin embargo, hoy está aquí por un motivo muy diferente: su motor V6 Maserati.
Citroën SM - Maserati
Aunque hoy en día pueda parecer una maniobra curiosa, Maserati fue propiedad de Citroën desde 1968 hasta 1975.
Por eso, el portaestandarte de la marca en la época, el nuevo SM, contó con un motor 2.7 V6 Maserati bajo el capó, derivado del V8 de la firma italiana, que entregaba 170 CV de potencia.
Dodge Avenger - Volkswagen
A simple vista, un sedán como el Dodge Avenger es lo más americano que te puedas echar a la cara... o lo menos europeo que haya pisado nuestras carreteras últimamente. Depende de cómo se mire.
Sin embargo, bajo el capó, al igual que otros Dodge y Chrysler de comienzos de siglo, optaba por un motor turbodiésel alemán. Sí, el 2.0 TDI de Volkswagen...
Dodge Avenger - Volkswagen
Hoy en día, sería impensable que una marca americana se asociara a Volkswagen para comercializar motores turbodiésel. Sin embargo, hace algo más de una década, no dudaron en abrazarse a las bondades de los TDI para ampliar su negocio en Europa.
Un claro ejemplo es el Avenger, que no triunfó tanto como el Caliber, pero que presumía de una mecánica con buen rendimiento, con 140 CV, y un consumo más que razonable: 6,2 litros cada 100 kilómetros.
Lancia Thema 8.32 - Ferrari
En los años 80, el Lancia Thema era una berlina bastante convencional, que compartía plataforma con el Fiat Croma y el Saab 9000. De hecho, si no fuera por la inclusión de un motor V8 en su gama, hubiera caído en el olvido...
Lancia Thema 8.32 - Ferrari
El motor V8 no era uno cualquiera, sino uno de origen Ferrari. Palabras mayores, no cabe duda. Encargado de dar vida al Tema 8.32, no ocultaba su procedencia, tal y como puedes ver en la foto.
Heredado del 308, se trataba de un V8, con 2,9 litros y 32 válvulas, con cambios en el cigüeñal y diversas mejoras de cara a dulcificarlo. No olvidemos que el Thema era una berlina de tracción delantera.
De este modo, la potencia se redujo de 240 a 215 CV, pero era un dato más que suficiente para acelerar de 0 a 100 en menos de 7,0 segundos.
McLaren F1 - BMW
A comienzos de la década de los 90, McLaren tenían en mente un proyecto de superdeportivo... al que le faltaba un motorizador.
Efectivamente, estamos hablando del McLaren F1, uno de los coches más icónicos de todos los tiempos, que se acabó decantando por un propulsor de origen BMW... tras el escaso interés demostrado por Honda y el poco 'glamour' que aportaba Isuzu.
McLaren F1 - BMW
BMW entró en escena de la mano del jefe de la división BMW M, Paul Rosche. El directivo alemán ofreció el motor 6.1 V12 de la firma, que en el McLaren F1 desarrollaba 635 CV de potencia (en su variante 'estándar').
De este modo, no era de extrañar que alcanzara los 386 km/h y acelerara de 0 a 100 en algo más de 3,2 segundos.
Mercedes-Benz Clase A - Renault
Recientemente, Mercedes-Benz ha presentado la cuarta generación del Clase A, un modelo que nació como monovolumen, pero que se acabó transformando en compacto.
En esta última generación, aunque sea algo que no aparezca en los dosieres de prensa, sigue recurriendo a algunas sinergias. Sí, estamos hablando de una marca francesa...
Mercedes-Benz Clase A - Renault
Fruto de los distintos acuerdos entre Daimler y la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, el Clase A 2018 sigue apostando por un motor originario de la firma del rombo, tal y como sucedía en el modelo precedente.
Estamos hablando de la variante A 180 d, que opta por un bloque turbodiésel de 1,5 litros, que anuncia 115 CV de potencia, 260 Nm de par máximo y un ajustado consumo medio de 4,1 litros cada 100 kilómetros.
Mitsubishi Galant - AMG
De cara a añadir un poco de picante al Galant, a finales de los 80, Mitsubishi recurrió a un preparador alemán, todavía independiente. Estamos hablando de AMG, empresa especializada en coches deportivos, que entró a formar parte de Mercedes-Benz hasta 1999... y que no se convirtió en marca propia, Mercedes-AMG, hasta 2014.
Solo se fabricaron 500 unidades de este modelo tan especial, por lo que resulta un vehículo bastante cotizado. Sobre todo, si está en buen estado.
Mitsubishi Galant - AMG
El trabajo del preparador de Affalterbachse afectó al conocido propulsor atmosférico 4G63 de Mitsubishi, con 2,0 litros de cilindrada, que desarrollaba 170 CV de potencia y era capaz de subir hasta las 8.000 rpm.
Porsche 914 - Volkswagen
Sin duda, no se trata del modelo más popular en la historia de Porsche. Tampoco el más cotizado de sus clásicos. ¿El motivo? Lanzado a comienzos de la década de los 70, este modelo se desarrolló junto a Volkswagen, a través de una joint-venture, de cara a colocarse como la variante de acceso a la gama.
Como curiosidad, la versión tetracilíndrica, con un humilde motor Volkswagen colocado en posición central-trasera, contaba con la cerradura de arranque a la derecha del volante.
Porsche 914 - Volkswagen
En el caso del 914, se podía optar por dos mecánicas, una de cuatro cilindros y otra de seis cilindros bóxer (914/6). Por supuesto, es la primera la que centra nuestra atención, ya que no todos los días se ve un Porsche con motor Volkswagen de apenas 80 CV de potencia...
SEAT Ibiza - Porsche
Presentado en el año 1984, el Ibiza fue uno de los primeros productos de SEAT, nacidos tras su ruptura con Fiat... y antes de su incorporación al grupo Volkswagen.
Tremendamente popular en nuestro mercado, este utilitario superventas era toda una caja de sorpresas, ya que contaba con diseño de Italdesign, el desarrollo de la carrocería era cosa de Karmann y los motores disfrutaban de ingeniería Porsche.
SEAT Ibiza - Porsche
En esencia, la colaboración técnica de SEAT, con una Porsche en horas bajas, se tradujo en labores de ingeniería para los motores de gasolina de los Ronda, Málaga e Ibiza, tres modelos nacidos tras el 'divorcio' de la marca española con Fiat.
Centrándonos en el Ibiza, encontramos los System Porsche 1.2 y 1.5, con 62 y 90 CV de potencia, así como una evolución del más potente, hasta los 100 CV, que se empleó en el SXI. Sin duda, eran el principal reclamo de una gama en la que también había un bloque diésel atmosférico, el 1.7 de 55 CV, así como un 0.9 de gasolina, con 44.