Aunque las autoridades y el mercado le estén dando la espalda a las mecánicas de gasóleo en los últimos tiempos, no son pocos los conductores que siguen apostando por los motores diésel como el que equipa el Volkswagen T-Roc de esta prueba. Sobre todo, si hacen muchos kilómetros al año o en coches de mayor tamaño y peso, donde aseguran un mejor consumo.

Y es que, quien busque un SUV con motor TDI dentro de la gama Volkswagen, encontrará en el T-Roc la primera opción, ya que los T-Cross y Taigo no lo ofrecen en la gama. Y aun así, solo dispone de un 2.0 TDI, con 115 o 150 CV (el que nos ocupa). De hecho, si buscas más potencia, tendrás que mirar a la versión de 200 CV del Tiguan.

Hecha la aclaración, en esta ocasión ponemos a prueba un coche bastante racional para quien necesite un 'todo en uno', con el que moverse a diario y afrontar largos viajes, acompañado por la transmisión automática de doble embrague DSG, de siete marchas, y un esquema de tracción delantera en un conjunto, que además, resulta bastante parco en consumos.

El Volkswagen T-Roc, a prueba en cinco puntos clave:

Diseño

Renovado a finales de 2021, bajo la fórmula del restyling, esta primera generación del Volkswagen T-Roc sigue sin ser un coche especialmente llamativo en términos de diseño. Y eso que se introdujeron mejoras en elementos como los grupos ópticos, parrillas, paragolpes...

Sensación que se acrecienta en el caso de configuraciones como la de la unidad que hoy nos ocupa, con el acabado Life, unas discretas llantas de aleación de 18 pulgadas (las de serie son de 17) o la pintura Plata Pirita Metalizado, que cuesta 600 euros. Así, quien quiera salirse un poco de lo común, tendrá que optar por un color más vivo o el acabado de corte deportivo R-Line.

Por lo demás, construido sobre la plataforma modular MQB del Grupo Volkswagen, nos enfrentamos a un modelo que alcanza los 4,24 metros de largo, 1,82 de ancho y 1,58 de alto, cifras que se combinan con una batalla de 2,59 metros. Así que, sí, curiosamente, es ligeramente más corto que un modelo de mayor enfoque urbano, como puede ser el Taigo.

Prueba Volkswagen T-Roc 2.0 TDI 150 CV DSG

Interior

El habitáculo ofrece un espacio normal para sus dimensiones, sin ser especialmente destacable en las plazas traseras. De hecho, tengo la sensación de que un Taigo puede ser más cómodo para los ocupantes o, sin ir más lejos, a la hora de instalar un sistema de retención infantil.

Sobre el maletero, ofrece unos correctos 445 litros de capacidad, que si bien no son un referente en la categoría (un Golf 5p ofrece 380 litros), sí que permiten cargar bastantes bultos, gracias a su profundidad. Además, en el caso de abatir los asientos, la capacidad resultante asciende hasta los 1.290 litros.

Por lo demás, el interior resulta bastante sencillo y con una calidad correcta, aunque para mi gusto, también algo inferior a la del Taigo y con demasiados acabados en negro piano, que se dañan y manchan con facilidad.

En cualquier caso, se recurre a una configuración de doble pantalla, que puede ser de hasta 10,2 pulgadas para la instrumentación y de 8,0 para el sistema multimedia, pero sin prescindir de mandos dedicados en la parte baja de la consola, para el climatizador, las funciones para desempañar la luneta o los asientos calefactables, por poner algunos ejemplos.

Prueba Volkswagen T-Roc 2.0 TDI 150 CV DSG
Prueba Volkswagen T-Roc 2.0 TDI 150 CV DSG
Prueba Volkswagen T-Roc 2.0 TDI 150 CV DSG

Mecánica

La gama del Volkswagen T-Roc ofrece motores de entre 110 y 300 CV de potencia, comprendidos entre el 1.0 TSI de acceso y el R, con su motor 2.0 TSI y su sistema de tracción total. A medio camino nos encontramos con el popular motor 2.0 TDI, un cuatro cilindros movido por gasóleo, que entrega 150 CV entre 3.000 y 4.200 rpm y un par máximo de 360 Nm entre 1.700 y 2.750 vueltas.

En líneas generales, no hablamos de la opción más refinada del mundo, pero sí encaja a la perfección con la filosofía del T-Roc, ya que ofrece un buen rendimiento, combinado con un consumo medio de 4,9 l/100 km (es difícil verlo por encima de los 6,0 litros, en condiciones 'reales').

Como decíamos al inicio, solo está disponible en combinación con la tracción delantera (la tracción total 4MOTION queda reservada a las versiones de gasolina de 190 y 300 CV), mientras que la transmisión DSG se muestra satisfactoria en todos los escenarios, con la salvedad de ser algo más brusca que otras opciones, en maniobras o a baja velocidad.

Prueba Volkswagen T-Roc 2.0 TDI 150 CV DSG

En marcha

En líneas generales, la respuesta del T-Roc es buena en todos los escenarios, más allá del buen hacer de su motor o de su peso en vacío, cifrado en 1.380 kilos, que es bastante menos de lo que suele pesar un SUV equivalente electrificado (ya sea híbrido o PHEV).

En la ciudad, el T-Roc se mueve con presteza y agilidad, mientras que, en carretera, gana velocidad con facilidad y permite viajar a velocidades de crucero elevadas, con soltura y sin que el consumo se dispare.

Es cierto, no es el modelo más confortable de la categoría, pero sí que demuestra un compromiso bastante elevado entre dinamismo y confort, con un comportamiento en zonas viradas superior a la media, ya que el coche no balancea en exceso y no hay sensación de subviraje marcada (algo que, salvo que te acerques al límite, no llegarás a experimentar).

Para finalizar, las prestaciones son las propias de un coche 'multiusos', sin excesos pero tampoco con carencias: 205 km/h de velocidad máxima y 8,6 segundos en la aceleración de 0 a 100. Además, el selector de modos de conducción permite escoger entre cuatro programas: Eco, Normal, Sport e Individual.

Prueba Volkswagen T-Roc 2.0 TDI 150 CV DSG

Equipamiento y precio

Esta variante turbodiésel de 150 CV está disponible con dos acabados, Life y R-Line (deportivo). En el caso del primero, el precio asciende hasta los 38.515 euros (sin descuentos). Por el T-Roc gasolina 1.5 TSI de 150 CV, caja automática y opción Life, Volkswagen pide 34.215 euros. ¿Precio de acceso a la nueva gama del T-Roc? Desde 30.230, para el 1.0 TSI de 110 CV.

Sobre el equipamiento de serie destacado de esta versión, debemos detenernos en elementos como el asistente de luz de carretera, el sistema de frenada de emergencia automática con detección de peatones, el Lane Assist, el control de velocidad de crucero adaptativo ACC, los faros LED, los protocolos de conectividad Apple CarPlay y Android Auto...

Volkswagen T-Roc Life 2.0 TDI 150 CV DSG

Motor Diésel, 4 cilindros en línea, turboalimentado, 1.968 cm³
Potencia 150 CV entre 3.000 y 4.200 rpm
Par máximo 360 Nm entre 1.700 y 2.750 rpm
Caja de cambios Automática de doble embrague DSG, 7 velocidades
0-100 km/h 8,6 s
Velocidad máxima 205 km/h
Consumo 4,9 l/100 km
Tracción Delantera
Longitud 4,24 m
Anchura 1,82 m
Altura 1,58 m
Peso en vacío 1.380 kg
Número de asientos 5
Capacidad del maletero 455 l
Precio base 38.515 euros