El Ford Pinto tiene mala reputación, en gran parte debido al escándalo que se produjo en los años 70 por la explosión del depósito de combustible en una colisión por alcance, que descubrió un fallo estructural del vehículo.

En la actualidad, la falta de entusiasmo por este modelo hace que las unidades que quedan sean un punto de partida barato para construir un 'hot rod' más apasionante. El Ford Pinto de este vídeo, por ejemplo, equipa un bloque LS V8 turboalimentado debajo del capó.

Según el creador de este proyecto, es solo el tercer propietario de este Ford clásico. La pintura azul es original, pero la imprimación rojiza se está empezando a ver en algunos puntos. Cree que el cuentakilómetros es exacto al mostrar poco más de 26.000 millas (unos 41.800 km).

Galería: Ford Pinto 1970

El LS V8 turboalimentado de General Motors cabe justo en el vano motor. No es de extrañar, ya que las opciones originales de propulsión del Ford incluían varios motores de cuatro cilindros, además del 2.8 V6 'Colonia'.

Mientras que el exterior parece destartalado, el interior está bastante más cuidado. Los asientos y el salpicadero ahora tienen acolchado en forma de diamante. Las alfombrillas son originales. En la parte trasera, la zona de la rueda de repuesto alberga ahora la batería.

Ford Pinto 1970

El gran V8 turboalimentado no tiene problemas para mover el Pinto. La puesta a punto actual incluye una presión de soplado de 2.0 bares y una mezcla rica de combustible para limitar la potencia. Aun así, pisar el acelerador con decisión se traduce en chamuscar los neumáticos de inmediato.

Ford Pinto 1970

Cuando se conduce con normalidad, el Pinto modificado parece un bonito clásico rehabilitado. Funciona con gasolina de 91 octanos y el constructor podría ajustar fácilmente el motor para obtener más potencia, modificando el soplado del turbo, la sincronización del motor y la mezcla de combustible. Además, como es un familiar de dos puertas, tiene espacio de sobra para transportar pasajeros o equipaje.

Ford Pinto 1970

El vídeo también muestra el Pinto en un elevador para que se puedan ver los bajos del vehículo. El coche tiene ahora frenos de disco en las cuatro ruedas y un depósito de combustible modificado.

Ford Pinto 1970

Debajo de los asientos traseros hay un refrigerador para la transmisión. Es necesario realizar algunos ajustes porque la carcasa del tren trasero flexiona al acelerar bruscamente y golpea el asfalto, así que el trabajo no ha terminado.