Para ciertas cosas, nunca es demasiado. Y esa afirmación incluye a los coches deportivos. O al menos, eso deben pensar en BMW, tal y como se desprende del curioso anuncio realizado hace unos días y que confirmaba la futura existencia de un nuevo modelo dentro de BMW M. Como si el M3 Touring, el M2 o el M4 CSL, por nombrar algunos, no fueran suficientes.
Todavía no conocemos el nombre oficial, pero gracias al perfil de Instagram de Franciscus van Meel, director general del departamento de Motorsport de BMW, podemos echar un primer vistazo (muy colorido por cierto) del prototipo. Que por cierto, también ha aparecido en fotos espía.
De hecho, el próximo deportivo de BMW está cubierto por un camuflaje muy inusual, en el que en lugar de los clásicos garabatos negros, encontramos imágenes y nombres de modelos de la saga M de BMW. Y además hay un detalle que nos permite aventurar el nombre del coche: BMW 3.0 CSL Hommage.
Se trata del pequeño alerón ubicado en el techo, exactamente igual que en el concept presentado en 2015 en el Concorso d'Eleganza Villa d'Este. Un elemento aerodinámico acompañado de un segundo alerón, colocado sobre la tapa del maletero, para enfatizar las líneas del coupé, tomadas íntegramente del BMW M4.
BMW 3.0 CSL Hommage, con alma de M4
En comparación con el modelo de dos puertas, el 3.0 CSL Hommage debería diferenciarse en otros detalles como la forma de los faros, el diseño de los paragolpes o el del difusor, del que podemos apreciar cómo 'acoge' una doble pareja de colas de escape.
En el plano mecánico, el futurible BMW 3.0 CLS Hommage utilizaría el mismo bloque 3.0 de los M3 y M4 Coupé, probablemente elevado a unos 600 CV de potencia y acoplado a una caja de cambios manual.
Este detalle no ha sido confirmado oficialmente, pero se aprecia la inscripción '6MT' en el portón trasero, acompañada de un 'FTW' que significa 'For The Winner'. Otra inscripción nos informa en cambio de que el nuevo coupé M será 'Insanely Epic' (Increíblemente épico).
BMW 3.0 CSL, el original
Echando un vistazo en el tiempo, el BMW 3.0 CSL original estaba basado en el CS 3.0, frente al que era más de 100 kilos más ligero, propulsado por los 200 CV que desarrollaba el bloque de 3,0 litros. De hecho, se trataba de la versión de carretera (se fabricaron poco más de 1.000 unidades) del coche que disputó el campeonato ETCC.
Además de la mecánica, también se modificó la aerodinámica, con aletines laterales, un llamativo alerón trasero, además de otro en el techo, lo que le daba un aspecto decididamente aterrador, que le valió el apodo de Batmóvil.