Los accidentes de tráfico se suceden día tras día en nuestras carreteras. Una de las principales razones para esto es el consumo de bebidas alcohólicas y estupefacientes, como indica la memoria del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, que explica que casi la mitad de los conductores fallecidos dieron positivo en alcohol, drogas y psicofármacos.

Por ello, la Dirección General de Tráfico ha puesto en marcha, desde el pasado 2 de agosto de 2021 y hasta el próximo 8 de este mismo mes, una nueva campaña en la que intensifica la vigilancia sobre el consumo de este tipo de sustancias.

Galería: Campaña de la DGT para controlar el consumo de Alcohol y drogas de la DGT

Durante una semana, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil incrementarán los controles para detectar un factor que estuvo presente en casi un tercio de los accidentes mortales en 2020. Las autoridades estarán atentas en distintos puntos de la geografía española, a cualquier hora, para evitar que los conductores imprudentes estén al volante bajo los efectos del alcohol o las drogas.

El objetivo de esto es que se reduzca el número de accidentes de tráfico, aunque no solo en carretera, sino también en los cascos urbanos. Para ello, la DGT ha invitado a los ayuntamientos de las localidades con más de 25.000 habitantes a sumarse a la campaña.

Furgonetas camufladas de la DGT

Esto puede surtir efecto, pues la mayoría del consumo se produce en lugares urbanos, donde también hay mayor tránsito de peatones. A esto habría que añadir que el 41,2% de las personas fallecidas por atropello también dieron resultado positivo, con lo que es imprescindible que la policía local se una a lo propuesto por la DGT.

El consumo de alcohol y drogas y la conducción son factores incompatibles para la seguridad. Tras el informe realizado por el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses de 2020, de los 597 conductores fallecidos en accidente de tráfico y sometidos a autopsia y análisis toxicológico, 291 resultaron positivos en este tipo de sustancias. Esto se traduce en un 48,7% de personas fallecidas bajo los efectos de alcohol o drogas, un 3,2% más que en 2019.

El alcohol continúa siendo la sustancia más consumida entre los conductores fallecidos (20,1%). Sobre esto hay que resaltar que del número total, el 78,5% tenía una tasa igual o superior a 1,2 g/l en sangre, algo que supera en 0,7 g/l el límite y que se considera como delito. Las drogas representan también el 20,1%, con la cocaína y el cannabis como las sustancias más comunes, mientras que los psicofármacos protagonizan el 13,4%.

Alcohol y coches

La tasa máxima de alcohol permitida en sangre es de 0,5 g/l (0,25 mg/l en aire espirado) en todos los conductores, salvo para los profesionales y noveles (0,3 g/l en sangre y 0,15 mg/l en aire espirado).

Las multas con tasas entre 0,25 mg/l y 0,50 mg/l se elevan hasta los 500 euros y la retirada de 4 puntos del carné de conducir. Para las tasas superiores a los 0,50 mg/l, la sanción es de 1.000 euros y 6 puntos del carné, mientras que los reincidentes son castigados con 1.000 euros y con 4 o 6 puntos, dependiendo de la tasa.

En caso de registrar una tasa superior a 0,60 mg/l (1,2 g/l en sangre), el conductor se enfrenta a un delito con una pena de tres a seis meses de prisión, o trabajos comunitarios de 30 a 90 días, además de la retirada del permiso de conducción de uno a cuatro años. Si el individuo se niega a someterse a la prueba, la pena es idéntica, aunque sin los trabajos en beneficio de la comunidad.

Campaña para controlar el consumo de Alcohol y drogas de la DGT

En el caso de las drogas, la presencia de esta sustancia en el organismo mientras se conduce se castiga con 1.000 euros y 6 puntos, pero esto puede llegar hasta la pena de prisión de tres a seis meses, trabajos comunitarios de 30 a 90 días y la privación del carné de conducir de uno a cuatro años. Si el conductor se niega a hacer la prueba, la pena va de seis meses a un año de cárcel y la retirada del permiso de conducir.

Campaña para controlar el consumo de Alcohol y drogas de la DGT