Si eres aficionado a los deportes de competición sabrás que los pasadores del capó, que a menudo se encuentran en los coches de carreras, están pensados como medida de seguridad, en el caso de que el cierre original falle.

Sin embargo, en el vídeo que acompaña a esta noticia, puedes ver que a este BMW M3 de competición le sucede algo, ligeramente diferente. Tanto es así que, la última cosa que cualquier piloto quiere tener en carrera es algún incidente que perjudique su visión o manejo del coche. Y no estamos seguros de cómo de importantes son las puertas en un coche de competición.

El piloto se encuentra rodando en el circuito alemán de Nürburgring y a pesar de la corta duración de la grabación, podemos ver un hecho que pocas veces habrás visto, al menos, desde dentro del vehículo.

Un nuevo vídeo publicado en el canal de YouTube del famoso circuito, nos muestra al piloto del equipo de carreras Setra Motorsport, rodando por la pista a 280 km/h. Si te fijas desde el comienzo, la puerta comienza a separarse lentamente de la carrocería.

Las irregularidades de la pista hacen que esa separación vaya a más, sobre todo al adelantar a un Porsche 911 en una sección del trazado. Sin embargo, cuando el BMW comienza a negociar una larga curva a izquierdas, la puerta del pasajero se empieza a separar de la carrocería de forma ostensible.

Comienza a vibrar de forma clara y de repente se desprende de la carrocería de forma súbita, con un fuerte silbido. En las imágenes, se puede ver al piloto mirar en un par de ocasiones tras el incidente, al tiempo que revisa los espejos retrovisores, para comprobar que no ha provocado ningún accidente, y reduce la velocidad.

De hecho, después de adelantar al Porsche, la puerta se desprende unos segundos más tarde, por lo que es de suponer que el 911 no debería encontrarse muy alejado del BMW. Eso, por no olvidar que el tamaño y peso de una puerta a esa velocidad, se convierte en un proyectil de gran calibre para el resto de vehículos en pista.

BMW M3 Touring E46 concept car 2000

En el vídeo, al principio se intuye una especie de correa azul atada a la puerta, aunque al final de la grabación se puede ver cómo se agita, fruto del viento. Además, en otro vídeo del equipo de carreras, observamos al coche entrando en los boxes, antes de volver a la pista una hora más tarde.

Suponemos que los miembros del equipo recuperaron la puerta y volvieron a instalarla en el coche antes de regresar al trazado. Una imagen del vehículo reparado al final de ese segundo vídeo, muestra una generosa cantidad de cinta americana alrededor de la puerta del pasajero. Suponemos que con suerte, fue suficiente para mantenerla en su lugar.

Fuente: Nurburgring / YouTubeSetra Motorsport / YouTube