Hay pocos todoterrenos tan míticos como los Land Rover y, desde luego, no son pocos los que se han convertido en campers u overlanders (tendencia de viajar y acampar en lugares remotos con modelos todoterrenos). La compañía británica Dormobile es conocida por sus transformaciones de este tipo de vehículos, y ahora mismo está a la venta una de sus creaciones, este genial Land Rover 110 de 1984, que actualmente se encuentra en Phoenix, Arizona (Estados Unidos), y por el que piden 83.000 dólares (unos 77.000 euros), nada menos.
Hablamos de un modelo que, según el anuncio, tiene capacidad para que duerman dos personas, y cuenta con comodidades como una cocina, nevera, un lavabo (con grifo extraíble para convertirlo en ducha exterior), un calefactor diésel para las noches más frías (con depósito de 2,6 litros) y, por supuesto, no falta el techo elevable, que aumenta la altura de la zona de vivienda hasta los 2,7 metros.
El modelo cuenta con aire acondicionado y accesorios como paneles solares de techo (montado sobre un cofre de aluminio hecho a medida, con cerradura), un generador auxiliar, parrilla de aluminio, paragolpes Asfir, iluminación auxiliar de tipo LED, un cabestrante específico, o neumáticos todoterreno BF Goodrich Mud Terrain T/A KM3.
Todo el mobiliario interior está fabricado en madera de arce, y ofrece un enorme espacio para ropa, cubertería y utensilios de cocina o herramientas, por ejemplo. El habitáculo goza también de iluminación ambiente en tecnología de tipo LED y de diversos adaptadores USB para carga de teléfonos u otros dispositivos electrónicos.



El corazón de este Land Rover 110 no es el motor original, sino un "300 Tdi" turbodiésel, de cuatro cilindros en línea y 2,5 litros, con 61.000 kilómetros en el odómetro, y junto a una caja de cambios manual R380 de cinco velocidades.
Aprovechando la instalación del nuevo bloque, llevada a cabo en el año 2017, se añadieron también un nuevo intercooler Allisport, nuevos radiador y vaso de expansión, o nuevos manguitos y correas, por ejemplo.
Lógicamente, goza de un sistema de tracción a las cuatro ruedas, además de una suspensión 'heavy-duty' con amortiguadores Bilstein, o un equipo de frenos mejorado (con discos traseros en lugar de tambores). El consumo del modelo es de alrededor de 11,0 litros cada 100 kilómetros, lo que gracias al depósito de combustible ampliado (106 litros), consigue una autonomía de unos 1.000 kilómetros.
Originalmente se creó a medida para un cliente francés, y en los años 2000 lo compró una pareja alemana y fue restaurado por completo. Fueron ellos, precisamente, los que añadieron el interior actual, antes de venderlo a un comprador estadounidense.
Fuente: Expedition Portal