Las grandes prestaciones de la KTM 1290 Super Duke se aprovechan al máximo en esta GT, diseñada para viajar sin límites.
Motor de 175 CV
La nueva moto viene propulsada por la última generación del motor V-Twin LC8 de su hermana ‘R’, con 1.301 cm3 y ángulo de 75 grados, al que los ingenieros de KTM han proporcionado unas cámaras de resonancia revisadas, válvulas de admisión de titanio y un nuevo mapeado de motor. Todo, para alcanzar los 175 CV de potencia y un par máximo de 141 Nm.
Esto hace que el propulsor tenga un tacto más suave a bajo régimen y la adición del Quickshifter+ permite unos cambios sin embrague muy suaves, subiendo y bajando marchas, que repercuten en la comodidad del viaje.
Frenada y control de tracción sensibles al ángulo de inclinación
La KTM 1290 Super Duke GT suma a sus prestaciones lo mejor de la tecnología de la marca de Mattighofen, incorporando frenada ABS y control de tracción sensibles al ángulo de inclinación, y los diferentes modos de pilotaje, incluyendo el nuevo programa Track, que permite una mayor capacidad de ajuste electrónico.
Instrumentación con gran pantalla TFT
También es nueva la instrumentación, que ahora está protegida por una cúpula de nuevo desarrollo aerodinámico, con múltiples posiciones de altura y un mejorado sistema de ajuste con una sola mano. La pantalla TFT de 6,5 pulgadas, a todo color, es perfectamente visible bajo la luz directa del sol e informa acerca del completo estado general de la moto, sin que el piloto tenga que desviar la atención de la carretera.
Mediante un interruptor de menú iluminado, situado en el puño izquierdo del manillar, junto al mando del control de crucero, el piloto de la KTM puede navegar a través de diferentes secciones y controlar múltiples funciones de la moto.
Iluminación full LED y faros auxiliares
En el rediseñado frontal, que mantiene las señas de identidad de la familia Duke, encontramos la nueva óptica delantera LED. El núcleo central en aluminio alberga seis diodos ultrabrillantes, mientras que otros adicionales conforman la luz diurna (DRL), para asegurar que la moto sea perfectamente visible por el resto de usuarios de la carretera.
Además, los faros auxiliares, ubicados en los laterales del depósito de la KTM, ofrecen una mejor iluminación del interior de las curvas, al caer la noche.
Suspensiones semiactivas WP
La Super Duke GT incorpora la última generación de suspensiones semiactivas WP, las más sofisticadas en toda la gama KTM, con una serie de sensores que analizan y adaptan automáticamente la puesta a punto, en función de las condiciones del asfalto, para ofrecer siempre la dinámica más precisa.
La precarga del muelle de la GT puede ajustarse con tan solo pulsar un botón y sin necesidad de herramientas. También es posible modificar con un solo dedo la amortiguación, en función del ritmo de marcha y de la carretera, en tres modos: Comfort, Street y Sport.
Puños calefactables, USB y conectividad con smartphone
En cada spolier lateral del depósito dispone de un compartimento de carga para pequeños objetos. Uno de ellos incluye una toma USB con el que se pueden cargar dispositivos móviles. Para mejorar el confort, los puños calefactables forman parte del equipamiento de serie.
Por último y con el objetivo de facilitar la ruta, la conectividad KTM My Ride para smartphone incluye la navegación en pantalla con indicaciones precisas y avisos de audio en cinco idiomas. También es posible recibir o rechazar llamadas, así como seleccionar la música favorita del usuario.
La moto saldrá al mercado con dos opciones de color: blanco o negro.
Probada en la Isla de Man por Michael Rutter
Para poner completamente a prueba todas las cualidades de la KTM 1290 Super Duke GT, la marca austriaca invitó al múltiple ganador del TT de la Isla de Man, del Gran Premio de Macao y de carreras del campeonato británico de Superbikes, Michael Rutter, a probar la nueva KTM en la legendaria Isla de Man. Una prueba cuyo vídeo puedes ver al inicio de este artículo.
El piloto británico comentó tras la prueba: “La GT es totalmente diferente a las motos que suelo pilotar, pero me ha sorprendido su rendimiento, particularmente el motor; el par y también la tracción son fenomenales. Impresionante. La comodidad es un factor importante; el asiento y la posición al manillar se adaptan tanto al pilotaje en circuito como al uso en carretera”.
Y concluyó: “Teniendo en cuenta que es una moto diseñada para hacer frente a muchos tipos de conducción, desde un uso explosivo hasta el turismo cotidiano, funciona de forma fantástica en todas las situaciones, incluso pilotando a fondo en el rápido y bacheado circuito de Jurby. Y lo mejor de todo, monta puños calefactables, algo fantástico para los que usan la moto todo el año ¡o incluso en verano aquí, en el Reino Unido!”.