5. Ferrari 275 GTB/4 NART Spider (1967)
Tan solo se construyeron 10 unidades del NART Spider, a petición del importador de Ferrari en Norteamérica, Luigi Chineti. Basado en el 275 GTB, este descapotable se ha convertido en un icono, gracias a su alargado capó y sus aletas traseras ensanchadas. Por otro lado, las siglas NART (North America Racing Team) hacen alusión al equipo de carreras de resistencia de Ferrari en Estados Unidos, desaparecido en 1982.
¿Cuanto cuesta? La unidad que condujo Steve McQueen, en la película 'El caso Thomas Crown', se ha llegado a subastar por 24 millones de euros.
4. Ferrari 290 MM (1956)
En 2015, RM Sotheby's vendió la unidad del Ferrari 290 MM, con chasis 0626, por algo más de 24,5 millones de euros. No es de extrañar, teniendo en cuenta que el mismísimo Juan Manuel Fangio compitió con este Ferrari en la Mille Miglia de 1956, terminando en cuarta posición. Esta unidad también venció en el World Sport Car Series, de ese mismo año.
3. Ferrari 335 Sport Scaglietti (1957)
El Ferrari 335 Sport Scaglietti es, oficialmente, el coche de carreras más caro jamás vendido en una subasta, con un precio de 31,2 millones de euros. Perteneciente a una colección privada durante los últimos 40 años, este 'Cavallino' siempre ha estado bien acompañado.
Entendiendo por buena compañía a conductores como Mike Hawthorn, Peter Collins, Wolfgang von Trips y Sir Stirling Moss, vencedor del Gran Premio de Cuba de 1958, con esta misma unidad.
2. Ferrari 250 GTO (1962)
El campeón indiscutible al hablar de subastas es el Ferrari 250 GTO. Tan solo se fabricaron 39 unidades de este supercoche, vendido por más de 33 millones de euros. Esta unidad está cargada de kilómetros en circuito, algunos legendarios, como los que completó en el FIA World GT Championship de 1963, competición en la que obtuvo los máximos honores.
1. Ferrari 250 GTO (1963)
Nada menos que 60 millones de euros es lo que ha pagado David MacNeil, CEO de WeatherTech y famoso coleccionista de Ferrari, por este vehículo.
Este vehículo tiene un gran historial, ya que fue ganador del Tour de Francia en 1964, y un año antes terminó en cuarto lugar en las 24 Horas de Le Mans. Esta unidad no ha sufrido ningún percance grave, de ahí el precio pagado por él.
Ahora que ya conoces los precios, ¿te parece demasiado dinero para invertir en un automóvil? Si es así te confundes, ya que adquirir un Ferrari icónico puede ser un negocio tremendamente rentable.