Abarth 500
Hace más o menos una década, el pequeño modelo de la marca del escorpión introdujo una caja de cambios Dualogic, robotizada, que no era muy cómoda en conducción normal, pero cumplía bien en el aspecto deportivo.
Para hacer las cosas más atractivas, el fabricante decidió prescindir de la palanca de cambios, a favor de tres botones a través de los cuales se podían seleccionar los modos D, N y R (directa, punto muerto y marcha atrás). Además, el volante incorporaba levas para seleccionar las marchas de forma manual.
Citroën Berlingo, Opel Combo y Peugeot Rifter
El Citroën Berlingo y el Peugeot Partner (hoy Rifter) ya empezaron en la generación anterior a ofrecer un dial giratorio para seleccionar el modo de su cambio automático (por entonces una caja manual robotizada CMP), en lugar de la clásica palanca selectora. Hoy sus descendientes, incluido el Opel Combo y las diferentes variantes comerciales, mantienen este tipo de solución.
Citroën E-Berlingo, Opel Combo-e y Peugeot e-Rifter
Las versiones eléctricas de los tres polivalentes modelos franco-alemanes (incluidos los comerciales), que están de estreno, tienen un mando específico para la transmisión que es diferente al de sus hermanos de combustión y se encuentra en la consola central, flanqueado por el botón P (de aparcamiento) y el del freno motor (B o brake).
Honda e
El pequeño eléctrico de Honda, el Honda e, combina un estilo interior neoclásico, con materiales de calidad y soluciones tecnológicas de corte futurista, como retrovisores digitales, que funcionan mediante cámaras y pantallas, o un selector del cambio mediante botones, con uno para la directa (D), otro para la marcha atrás (R) y otro para el punto muerto (N) y el modo parking (P).
Hyundai Tucson
La última generación del SUV compacto de Hyundai, el Tucson, ha dado un notable salto tecnológico, que se nota en el diseño, en los elementos de seguridad y también en la nueva instrumentación. Ya sean las versiones convencionales o el híbrido, si el cambio es automático, el selector es por botones, idéntico al del KONA EV y similar al del Nexo, el modelo de hidrógeno de la casa.
Lamborghini Aventador / Huracán
La última generación de superdeportivos de Sant'Agata Bolognese ha suprimido por completo la caja de cambios manual, perdiendo así la característica rejilla de cambios similar a la utilizada por Ferrari en el pasado.
El Aventador y el Huracán, sin embargo, ofrecen un llamativo salpicadero de estilo aeronáutico con espectaculares botones, no solo para la transmisión sino también para el arranque, que recuerdan a los mandos de un avión. El último en llegar, el SUV Urus, ha seguido el mismo camino.
Mercedes-Benz Clase E
Hace ya casi veinte años que los coches de la marca de la estrella han trasladado el control de la transmisión automática a la columna del volante, al más puro estilo americano. Teniendo en cuenta que hoy en día la mayoría de los modelos del catálogo tienen una transmisión automática, podemos decir que incluso la caja manual está ya cerca de la extinción.
Esta elección de Mercedes-Benz también ha dado lugar a una segunda peculiaridad: la palanca está en el lado derecho, donde todos los demás fabricantes tienen el mando de los limpiaparabrisas, que en este caso está integrado en la palanca izquierda, junto con los intermitentes.
Tesla Model 3
Los coches eléctricos de la marca californiana se distinguen por un altísimo nivel tecnológico que se manifiesta en la interfaz de usuario, que ha eliminado y digitalizado prácticamente todos los mandos tradicionales, dejando solo lo esencial, al alcance de la mano.
Así pues, la palanca para introducir la marcha adelante o la marcha atrás, que está en la columna de dirección como en los Mercedes-Benz, incluye también el mando para activar el control de crucero y la posición de aparcamiento (P).