Lamentablemente, en los tiempos de inflación y altos tipos de interés que vivimos, comprar un coche por un precio barato, o incluso razonable, es casi misión imposible. Sensación que se incrementa al hablar de los SUV, el tipo de carrocería de moda.
¿Alternativas? Tal vez, mirando hacia el Dacia Duster o algún modelo de MG se pueda encontrar algo a un precio interesante, pero... ¿y si se busca algo de tamaño compacto y con cierta 'imagen'? En ese caso, tal vez, el Volkswagen T-Roc 2023 de esta prueba pueda convertirse en una alternativa interesante.
Y no lo decimos solo nosotros, sino que el todocamino de Volkswagen se coló el top5 de ventas del mercado español, a lo largo del año 2022. Por ello, nos hemos decidido a probar una de las versión de acceso del modelo, con motor de gasolina, acabado Life y tracción delantera, que cuesta menos de 31.000 euros.
Para ser exactos, su precio es de 30.860 euros (sin incluir descuentos), aunque para quien tenga que lidiar a diario con una zona de bajas emisiones, hay que aclarar que su motor de gasolina sin electrificar se debe conformar con el distintivo ambiental C de la DGT.
Y también es cierto que, recientemente, Volkswagen ha introducido una versión todavía más barata que este Life que probamos, y que cuesta 29.220, aunque al estar mucho menos equipada y más dirigida a flotas (por ejemplo, empresas de coches de alquiler), hemos preferido dejarla a un lado en nuestra prueba de conducción en vídeo.
El Volkswagen T-Roc 2023, a prueba en cinco puntos clave:
Diseño
Construido sobre la plataforma MQB del Grupo Volkswagen, la misma que el Golf o el Tiguan, el T-Roc 2023 alcanza los 4,24 m de largo, 1,82 de ancho y 1,58 de alto. Por lo que, técnicamente, hablamos de un SUV a medio camino entre los segmentos urbano y compacto.
Dicho esto, puede que su diseño no sea el más llamativo del segmento, incluso tras recibir un restyling hace relativamente poco. Pero debemos reconocer que esta combinación, de pintura Blanco Puro y techo negro, que cuesta 715 euros, le queda bastante bien.
Las llantas sí que son las de serie en este acabado Life, en medida de 17 pulgadas, y si quieres equipar unas de 18, más grandes y llamativas tendrás que pagar 480 euros extra.

Interior
Por dentro, tal vez, lo más llamativo sea la configuración de doble pantalla: el cuadro de instrumentos de serie es de 8 pulgadas, aunque opcionalmente el Digital Cockpit puede ser de 10,2.
Por su parte, la pantalla del sistema multimedia siempre es de 8 pulgadas y, como punto a su favor, debemos señalar que los mandos del climatizador están situados fuera de ella, lo que siempre hace que los manejemos de forma más intuitiva.
En términos de espacio, en las plazas traseras, la habitabilidad es correcta para dos adultos, tanto por altura como por espacio para las piernas, mientras que la plaza central resulta algo estrecha y menos cómoda (mucho peor, si se instalan dos sistemas de retención infantil).
¿Y el maletero? Pues llega a unos correctos 445 litros de capacidad, por lo que resulta más grande que el del T-Cross y similar al del Taigo.



Mecánica
La versión de acceso a la gama T-Roc recurre a un motor modesto, pero efectivo, como es el ya más que conocido 1.0 TSI. Una denominación que esconde un bloque de 1,0 litros y tres cilindros, con 110 CV y un par máximo de 200 Nm, entre 2.000 y 3.000 rpm, siempre asociado a un cambio manual de seis marchas.
Como es lógico, no resulta tan refinado como un bloque de cuatro cilindros, pero la verdad, tampoco parece un mala opción para moverse por la ciudad y sus alrededores, que es lo que hacen la mayoría de usuarios de este tipo de coches.
Fuera de ella, también se defiende, con unas prestaciones correctas: 185 km/h de velocidad máxima y 10,8 segundos en el 0 a 100. Eso sí, obliga al conductor a gestionar el cambio con precisión, para sacar lo mejor de sí
La pregunta del millón: ¿interesa pasar al motor de 150 CV, que además homologa un consumo similar? Pues si se va a viajar cargado y se dispone del presupuesto, la respuesta es que probablemente sí.
Y hablando de consumo, el dato homologado de este 1.0 TSI de 110 CV es de 6,0 l/100 km, una cifra que durante nuestra prueba ha estado en el entorno de los 6,5 l/100 km, que es un buen dato

En marcha
Dinámicamente, el T-Roc es un modelo bastante neutro, en todos los sentidos. Es cierto que no emociona en la conducción, pero a decir verdad, todo lo hace bien… aunque no sea el mejor en nada concreto. Y el primer elemento cumplidor, como ya hemos dicho, es el motor, a pesar de su naturaleza tricilíndrica.
El T-Roc no es el modelo más cómodo de la categoría, pero sí que consigue alcanzar un interesante equilibrio dinamismo y confort, colocándose por encima de la media en zonas de curvas, ya que ni balancea ni subvira… a no ser que te acerques al límite.
Además, se mueve con agilidad en ciudad y se posiciona como una opción ideal para el día a día. Eso sí, este modelo de acceso no ofrece ni modos de conducción ni suspensión adaptativa, como sí ofrecen otras versiones de la gama.

Equipamiento y precio
Como ya te hemos adelantado, este T-Roc 1.0 TSI Life no es la opción más barata de la gama, dada la presencia de la mencionada nueva versión de acceso, desde 29.220 euros. Ahora bien, por los 30.860 euros que cuesta la versión probada (sin incluir los descuentos vigentes), la verdad es que resulta un modelo interesante.
¿Y el equipamiento? Pues lógicamente, aunque no viene mal de serie, para tenerlo 100% a tu gusto, incluyendo todo lo que quieras o necesites, como el navegador, el cargador inalámbrico, los asientos calefactables o la cámara de marcha atrás, tendrás que pasar por caja.
Ahora bien, lo bueno es que los opcionales se agrupan en tres paquetes, no demasiado costosos y con nombres bien ilustrativos: Hola Seguridad por 885 euros, Hola Tecnología por 905 euros y Hola Confort por 880 euros.
Volkswagen T-Roc Life 1.0 TSI 110 CV