La nueva tienda de Lego en Leicester Square, en Londres, la más grande del mundo del fabricante danés de juguetes, cuenta en su exhibición con un Aston Martin DB5 fabricado con ladrillos de plástico... ¡a tamaño real!

El famoso clásico, popularizado entre otras cosas gracias a las películas de James Bond, ha necesitado nada menos que 347.954 piezas de Lego para su construcción, y ha requerido 1.366 horas de montaje, nada menos, el equivalente a unos 57 días, o casi dos meses.

El vídeo adjunto muestra parte del proceso de construcción de este genial DB5, que incluye elementos funcionales como faros o una matrícula rotativa, o una instrumentación en el habitáculo que está retroiluminada. El volante parece ser el único elemento que no está fabricado con Lego.

Como ves, al modelo le falta la puerta del acompañante (la izquierda, porque se trata de un modelo con volante a la derecha), ya que sus creadores han querido que parezca que Bond ha utilizado el eyector del asiento del pasajero, y de paso facilitan que los visitantes puedan ver el habitáculo con mayor facilidad.

 

El modelo pesa la friolera de 1.037 kilogramos (¡cómo pesa el plástico!), lo cual no dista tanto del peso del Aston Martin DB5 original, que ronda los 1.468 kilogramos en vacío.

La reciente mejora de la tienda de Lego de Leicester Square, en pleno centro de Londres, la convertirá en la tienda Lego más grande del mundo, aunque el producto más grande no será este DB5, sino el llamado 'Tree of Discovery', con más de medio millón de piezas. 

Cabe recordar que Lego tuvo a la venta durante un tiempo el genial set de un Aston Martin DB5 de James Bond, con 1.295 piezas y un precio de unos 150 euros, pero lamentablemente ya no se produce.

El fabricante danés está planeando lanzar una versión más pequeña del DB5, con solamente 298 piezas y solo 16,5 centímetros de largo (la mitad que el antiguo), que debería lanzarse por unos 20 euros.